Así son las 5 recetas con avena de las que todo el mundo habla
Recetas con avena: Las mejores recetas saludables con las que empezar bien el día

5 recetas con avena para empezar el día de forma sostenible
Estas recetas con avena son todo lo que necesitas para empezar el día con energía. Así es cómo puedes desayunar (o merendar) con este alimento tan sano y lleno de fibra.
Desayunar en Madrid puede ser un plan de lo más original para hacer durante tu visita a la ciudad. Debes saber que, independientemente de que visites la ciudad o no, la avena es un alimento fundamental para tu dieta.
Aquí verás algunas de las recetas que no pueden faltar en tu rutina diaria. Con frutas, chocolate o frutos secos, la avena la podrás combinar, siempre, con lo que más te guste.
1.- Galletas de avena y plátano con chocolate
2.- Tortitas fitness de salvado de avena y claras de huevo
3.- Porridge de avena con fruta y frutos secos
4.- Smoothie Bowl de fresas, plátano, queso y avena
5.- Crumble de fresas, arándanos y avena
1. Galletas de avena y plátano con chocolate
Las galletas de avena y plátano son sencillas de elaborar, ya que tienen pocos ingredientes y son económicos en el mercado. Además, están buenas y son muy saludables como snack.
La combinación avena, chocolate y plátano es la estrella de las recetas con avena.
Ingredientes
- 3 plátanos maduros
- 1 vaso y medio de avena
- Pepitas de chocolate (al gusto)
- 1 cucharada azúcar moreno
Pasos a seguir
Corta los plátanos en rodajas y ponlos en un bol y aplástalos cuidadosamente. Añade la avena, las pepitas de chocolate y una cucharada de azúcar moreno y amasa hasta dar forma.
Haz pequeñas bolas y aplástalas para dar forma de galleta. Mételas en el horno durante 15 o 20 minutos. Una vez pasado ese tiempo, retíralas del horno y templa sobre una rejilla.

2. Tortitas fitness de salvado de avena y claras de huevo
Los clásicos pancakes o panqueques, son muy conocidos en países como EEUU. Aunque la receta original de las tortitas americanas es de lo más popular, siempre podrás hacer una versión fit, gracias a la avena.
Una vez las pruebes, las tortitas será tu receta con avena favorita.
Ingredientes
- 1 huevo
- 2 claras de huevo
- 250 ml leche vegetal
- 80 g de azúcar
- 200 g harina de avena
- 1 cucharadita de levadura química
- 2 cucharaditas esencia de vainilla
- Frambuesas y miel (para acompañar el plato)
Pasos a seguir
Bate las claras de huevo y el huevo con un poco de sal y azúcar, de forma que tripliques el volumen del líquido y se vuelva blanquecino.
Añade leche y 2 cucharadas de vainilla y mezcla hasta que todos los ingredientes se integren. Luego, añade la levadura y la harina de avena tamizadas, siempre mezclando con movimientos no muy bruscos.
En una sartén, echa unas gotas de aceite de girasol y espera a que caliente. Luego, añade dos o 3 cucharadas soperas de la masa y deja cocinar durante unos minutos por cada uno de los lados.
Una vez listas, podrás acompañar el plato con miel, arándanos, frambuesas o cualquier otra fruta que te guste.

3. Porridge de avena con fruta y frutos secos
Tal vez te preguntes qué es el porridge. Se trata de unas gachas d etoda la vida. Es un alimento completo, sano y nutritivo que ha triunfado mucho en las redes dentro de las recetas con avena.
Suele completarse co frutas, especias, miel o frutos secos, por lo que siempre podrás combinarlo de maneras diferentes sin necesidad de repetir plato.
Ingredientes
- 200-250 ml de leche (de vaca o vegetal) o agua
- 4 cucharadas de copos de avena
- Opcionales: canela, vainilla, miel, fruta fresca, frutos secos, entre otras.
Pasos a seguir
Pon a calentar la leche o agua en un cazo hasta que comience a hervir. Luego, añade los copos de avena y cocina a fuego lento durante 2 minutos, siempre removiendo para evitar que se pegue al utensilio de cocina.
Una vez tengas una especie de papilla con grumos, apaga el fuego y deja reposar durante 1 minuto. Ahora añade la canela, la fruta o las especias que desees para el plato y sirve.
En caso de que no te guste caliente, siempre podrás meterlo en la nevera para comerlo en frío. Refrescante y sano.

4. Smoothie Bowl de fresas, plátano, queso y avena
Fresas y plátano combinan bastante bien, por lo que las meriendas prometen si las acompañas de la fruta, la avena y el queso. Copos de avena a un batido tan típico, ¿Es posible?
Siempre podrás añadirlo al completo y hacer un batido casi de cuchara, o simplemente, esparcir algunos copos para darle un toque a tu smoothie.
Ingredientes
- 1 Plátano natural o congelado
- 5-6 Fresas naturales o congeladas
- 120 g de queso freco batido natural
- 2 cucharadas de copos de avena
- 1 lima (o 1/2 limón en su lugar)
- 1 Fresa grande, para decorar
- Semillas de chía, de amapola o las que elijas
- Coco rallado
Pasos a seguir
La receta es de lo más sencilla. Coge una batidora de vaso tipo blender o una picadora, puesto que será tu mejor aliada durante la receta.
Corta el rabo a las fresa, lávalas y sécalas con cuidado. Trocéalas junto con el plátano y corta en rodajas. Coloca las frutas y el queso batido en la batidora y añade una cucharada de vainilla al gusto, el zumo y la ralladura de la lima y los copos de avena.
Tritura todo junto, en varias turnos y siempre removiendo hasta que consigas una textura homogénea. Ajusta siempre las cantidades al gusto, sobre todo las de queso y las de avena. Lograrás manejar la espesura.
Sírve el smoothie y, con la fresa grande, decora junto con frutas del bosque o una hoja de menta. No te olvides de añadir las semillas y/o frutos secos que más te gusten

5. Crumble de fresas, arándones y avena
El crumble es una elaboración británica que cuenta con variantes similares en otros países. El nombre hace referencia a las migas crujientes que cubren la base de fruta.
Puede sonar raro, pero es muy sencillo de preparar y podrás versionarlo en una receta saludable para tomar de postre, de merienda o de desayuno. Las fresas y arándanos son una mezcla espectacular, pero puedes tomarlos con cualquier fruta.
Ingredientes
- 200 g de fresa
- 50 g de arándanos frescos
- 1/2 Naranja
- 50 g de copos de avena
- 15 gramos de almendras
- 10 ml de sirope o 1 o 2 dátiles triturados, sin hueso, con agua
- Mantequilla de cacachuete natural, al gusto
- Leche o bebida vegetal al gusto
- Canela molida
- Esencia de vainilla
Pasos a seguir
Precalienta el horno a 200ºC con calor arriba y abajo. Lava, seca y prepara la fruta mientras tanto. Trocéala en trozos pequeños. Mezcla todo, con los arándanos en un recipiente y añáde una cucharada de zumo de naranja y un poco de ralladura.
Mezcla en un recipiente los copos de avena, las almendras, la mantequilla de cacahuete, canela o esencia de vainilla y el sirope. Aprieta bien con un tenedor para integrar todo y ve añadiendo, poco a poco, leche o bebida vegetal, hasta conseguir una textura de migas húmedas.
Cubre toda la fruta con esta mezcla y aprieta si deseas un plato más homogéneo. No hace falta que añadas la cobertura si te gusta más la fruta. Añade un toque de canela y 30 minutos al horno.
