El último capricho de Ibrahimovic es para no creérselo... y su precio, tampoco

Con 39 años cumplidos, Zlatan Ibrahimovic se mantiene al pie del cañón. Su concurso con el Milan está siendo fundamental para que el club rossonero comande la Liga italiana y amenace, por fin, la hegemonía de la Juventus en el scudetto, que se acerca ya peligrosamente a la década de duración. El sueco no ha podido terminar el año jugando, a causa de una inoportuna lesión, pero volverá en el inminente 2021 para seguir haciendo de las suyas. 

El delantero de origen bosnio también es todo un personaje fuera de los terrenos de juego. Su última locura ha sido la compra de un bosque en la zona de Åre, un pueblo de montaña próximo a la frontera con Noruega en el que la familia del sueco tiene una villa, y donde ha estado pasando estos días festivos de Navidad. 

Ibrahimovic es un gran aficionado a la caza y a la pesca y ahora, cada vez que regrese a su país, ya no tendrá que preocuparse del lugar en el que llevarlas a cabo. Será en su propio bosque, un terreno de más de 1.000 hectáreas por el que ha pagado 3 millones de euros. El sueco ha formalizado todos los permisos para poder desarrollar allí su pasión cinegética y también para poder conducir en esos terrenos su flamante moto de nieve de último modelo. 

La idea del delantero de Malmoe es vivir en su país en cuanto cuelgue las botas. De hecho, en su última aventura en Milán no está acompañado por su familia, ya que prefiere que sus dos hijos se sigan educando en su Suecia natal. Precisamente, y en declaraciones a la revista SportsWeek, Ibrahimovic se mostró muy navideño. "Para mí nunca pido nada. Soy yo Papá Noel, soy yo quien trae regalos a mis 27 hijos: dos están en Suecia y 25 en Milanello", en referencia a sus compañeros en el Milan, con los que domina en la Liga italiana.