Barcelona y Atlético rugen en la Champions mientras Luis Enrique y Guardiola aúllan
Azulgranas (3-0) y rojiblancos (0-6) se exhiben en Europa con Lewandowski y Julián Álvarez desatados, mientras que los dos entrenadores españoles naufragan, con el catalán, encima. autolesionándose
El FC Barcelona y el Atlético de Madrid protagonizaron anoche una exhibición de poder en la Champions League, dejando claro que están listos para todo en la competición. Los culés derrotaron con contundencia al Brest (3-0), mientras que los rojiblancos destrozaron al Sparta en Praga con un histórico 0-6. Sin embargo, no todos los equipos favoritos tuvieron una noche gloriosa: el PSG de Luis Enrique cayó derrotado ante el Bayern (1-0), y el Manchester City de Pep Guardiola dejó escapar una ventaja de 3-0 ante un sorprendente Feyenoord, que igualó el marcador en los últimos quince minutos.
En el Estadio Olímpico de Montjuic, el Barça mostró una versión muy sólida. Casadó lideró el mediocampo, mientras que Dani Olmo y Lewandowski (que marcó sus goles 100 y 101 en Champions) se encargaron de sentenciar a un débil rival. Hansi Flick, satisfecho tras el partido, destacó que "el equipo está creciendo en todos los aspectos". Con esta victoria, el Barça tiene a mano pasar la liguilla entre los ocho primeros y manda un mensaje claro al resto de Europa: han vuelto.
Por su parte, el Atlético de Madrid firmó una actuación de ensueño en Praga. Griezmann y Julián Álvarez fueron las grandes figuras de un equipo que volvió a ser letal en ataque y sólido en defensa. Diego Simeone no escatimó elogios hacia sus jugadores: "Esto es lo que somos, un equipo con hambre y ambició". Tras su mal arranque de competición, los rojiblancos se presentan como claros candidatos a pasar de ronda.
Autolesiones
Mientras tanto, en Inglaterra, el Manchester City protagonizó un inesperado naufragio. Los de Guardiola parecían tener todo bajo control tras cinco derrotas consecutivas con un 3-0 en el marcador, pero el Feyenoord reaccionó con fuerza para empatar 3-3 en los últimos quince minutos. Las cámaras captaron a Pep llevándose las manos a la cabeza varias veces. Se estaba autolesionando. "Me hice los arañazos yo mismo, con los dedos: quería hacerme daño". Esperemos que no se ponga de moda, al menos en el fútbol. Quizás en la política siente mejor.
No menos mal resultado para un español fue el partido del PSG, que cayó derrotado por 1-0 frente al Bayern. Luis Enrique, cada vez más cuestionado, admitió que "el equipo está lejos de su mejor versión". El conjunto parisino, que partía como uno de los outsiders para intentar ganar la Champions, ahora tendrá que pelear hasta el final por clasificarse a los octavos de final, algo que podría resultar hasta milagroso.
Con esta jornada, se reafirma el dominio de los equipos españoles en el panorama europeo, mientras algunos gigantes como el PSG y el City demuestran que también son vulnerables. Tanto Flick como Simeone celebran la buena salud de sus proyectos, mientras que Guardiola y Luis Enrique tendrán que buscar soluciones urgentes para enderezar el rumbo.