El Ingreso Mínimo Vital, otro fiasco del Gobierno de coalición

Casi dos años después de su implantación, al Ingreso Mínimo Vital (IMV), la propuesta estrella de Pablo Iglesias y Podemos, sigue sin despegar. Y es que tras su inicio en plena pandemia y la correspondiente ilusión de las personas más vulnerables, se ha visto que es una medida ineficaz que además rechaza la mayoría de solicitudes.

La Asociación de Directores y Gerentes de Servicios Sociales ha denunciado  que el Gobierno solo está concediendo una de cada cuatro solicitudes que se presentan para acceder al Ingreso Mínimo Vital, lo que implica que, "únicamente el 12% de la población bajo el umbral de la pobreza en España" se haya beneficiado de esta prestación. "El IMV llega a 428.000 hogares de las más de 1,7 millones solicitudes", ha lamentado la entidad a través de un comunicado.

En dicho texto, la asociación también pone en el foco la cobertura "desigual" que existe del IMV en el territorio nacional. Según ha explicado, hay comunidades autónomas "que únicamente tienen una cobertura del 7,1%, como Cataluña, o 7,5% en Canarias", mientras que "Navarra supera el 27%" y "Ceuta y Melilla se sitúan en torno al 25%".

El chef José Andrés cuestiona el ingreso mínimo perpetuo siendo de izquierdas

Sí ha reconocido la entidad, por otra parte, que se han notado las modificaciones incorporadas tras el trámite parlamentario en la ley del Ingreso Mínimo que entraron en vigor en enero de 2022 y que, según ha explicado, "han aumentado el ritmo de concesiones" favorecido "la incorporación de nuevos perceptores".

En este sentido, ha explicado que, desde diciembre de 2021 se han incorporado a la percepción del IMV 330.000 personas (unas 110.000 mensuales), frente a las alrededor de 30.000 al mes que se registraron durante el período de 9 meses, de marzo a diciembre, en el que estuvo vigente el IMV en 2021.

Servicios Sociales reclama cambios

Los directores y gerentes de Servicios Sociales reclaman "nuevos cambios" en esta prestación que "ayuden a llegar al objetivo previsto en la aprobación de la ley" en cuanto al número de personas beneficiarias.

Además, denuncian "el laberinto burocrático" que supone el IMV y que, según han apuntado, ha hecho que en la mayor crisis social de la Historia esta prestación "se haya implantado a un ritmo mucho más lento de lo previsto".

Del mismo modo, pide al Ministerio de Inclusión que, "en el momento en que se está produciendo la mayor crisis de refugiados de los últimos años", se utilice esta ayuda como "herramienta para facilitar" la inclusión de estas personas que están llegando al país.