El estremecedor artículo que publicó hace apenas un año la periodista asesinada

Cada vez que le tocaba escribir la noticia de algún nuevo asesinato machista sus compañeros la oían decir "cualquier día me puede pasar a mí". Nunca puso una denuncia por maltrato, porque no sufrió maltrato físico, pero sufría maltrato psicológico, ese que no se ve: "No era un maltrato tan visible, sino uno más silencioso y menos evidente", ha declarado el director de El Correo de Burgos-El Mundo para el que trabajaba Yolanda Pascual, Ricardo García Ureta.

Yolanda se había separado hacía cuatro años de su asesino confeso, Iñaki González, y ella se quejaba de que sufría violencia psicológica de su exmarido. Pero apenas si hablaba de él. Prefería hacerlo de su hija de 17 años, por la que iba a acudir esta misma semana al juzgado para solicitar la retirada de visitas paternas concedidas al mismo hombre que este miércoles presuntamente le quitó la vida en el garaje de su casa a puñaladas.

Ahora cobra un especial sentido y pone los pelos de punta el artículo que Yolanda escribió hace un año en su periódico titulado Es un problema de todos. Un texto en el que pedía la implicación de toda la sociedad y los poderes públicos para evitar casos como el que ella misma ha protagonizado apenas 12 meses después de escribirlo.

Pascual hacía hincapié en la educación de los jóvenes para evitar la violencia machista: "Algo hemos avanzado, pero aún un porcentaje de jóvenes -de ambos sexos- consideran que obligar a sus parejas a tener sexo no es delito ni maltrato y darían segundas oportunidades a su supuesto maltratador. No llegan a identificar como violencia un insulto, una crítica en el modo de vestir o controlar el móvil de la pareja. Y siguen viendo los celos como una prueba de amor. Educación desde el primer suspiro de vida”.

Además insistía en la violencia psicológica: "Todos debemos ser conscientes de que un insulto como ‘estúpida’; un desprecio como ‘tú que sabes’ o ‘no vales para nada’; o golpes en muebles para amedrentar al contrario, son también maltrato y, en casi todos los casos, el primer paso para que se produzca la violencia física". 

Yolanda abogaba por la educación para poder detectar desde el primer momento el maltrato y pedía también mayor prevención a la sociedad y a los poderes públicos: "Esas son las vacunas y quizá así, un día no convoquemos macro manifestaciones”. Manifestaciones como la que se convocó este jueves en Burgos en repulsa de su propio asesinato.