| 06 de Mayo de 2024 Director Benjamín López

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La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño.
La vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño.

El Gobierno naufraga: la economía española no despega pese a la euforia oficial

El PIB ha crecido este 2021 un 5%, lejos de las previsiones del Gobierno, y muy por debajo de otros países del entorno que registraron unas caídas mucho más leves tras la pandemia.

| Andrea Jiménez España

El Instituto Nacional de Estadística ha constatado una realidad que el Gobierno trata de enmascarar con su triunfalismo habitual. La recuperación tras la pandemia no ha llegado. La economía española creció durante el 2021 un 5%. Es cierto que es su mejor dato desde 2000, pero no es menos cierto que partíamos de una caída del 10,8% en 2020, con lo cual aquella rápida recuperación que pronosticaba Nadia Calviño se ha quedado en eso, en un mero pronóstico fallido.

Y es que, lo de la 'futurología' y los pronósticos parece que no se le da demasiado bien al Gobierno y todas sus previsiones económicas, han quedado en la nada tras los datos que ha dado a conocer el INE. El avance del PIB del 5% registrado en 2021, pese a ser el más pronunciado en 21 años, se ha quedado 1,5 puntos por debajo de la previsión de crecimiento del Gobierno para dicho ejercicio que lo había colocado en el 6,5%.

La demanda nacional aportó 4,6 puntos al PIB en 2021, cifra 13,2 puntos superior a la de 2020, mientras que la demanda externa contribuyó con 0,4 puntos, 2,6 puntos por encima del ejercicio anterior. A precios corrientes, el PIB de 2021 se situó en 1.202.994 millones de euros, un 7,2% más que en 2020.

Pero si a este dato macroeconómico se suma otro que se dio a conocer este jueves, la del empleo, la radiografía de la situación en España no es, ni mucho menos, como la pretenden pintar desde el Gobierno. Y es que, a pesar del buen dato general de la bajada del paro, si se ahonda en las estadísticas se puede ver la cruda realidad. Se ha producido un leve descenso de la población activa respecto a las cifras prepandemia, a lo que hay que añadir que el principal motor del empleo ha sido la administración pública, lo que demuestra la débil situación que atraviesa el tejido empresarial español.

La tasa de desempleo juvenil sigue por las nubes

A todo esto, hay que unir que la tasa de desempleo juvenil sigue por las nubes, ya que todavía se mantiene por encima del 30%, la más alta de toda la UE. De hecho, la tasa de paro de los menores de 25 años a cierre de 2021 es superior a la registrada antes de la irrupción del covid (30,51%).

Además, en líneas globales, por mucho que Sánchez dijese este jueves que "los datos de desempleo vuelven a corroborar que la recuperación justa avanza en España", la situación es preocupante, pues nuestro país encabeza desgraciadamente las listas del paro de la UE, con una tasa del 13,3% y junto Grecia, duplican la media de los 27.

España crece al 5%, por debajo de otros países como Francia (7%) o Italia (6,5%), pese a que las economías de estos países no habían caído tanto como la española con la irrupción de la pandemia

De la misma forma ocurre con el PIB español, que no se recupera al mismo ritmo que otros países de la UE, como Francia, que también este viernes ha dado a conocer sus datos macroeconómicos, cerrando 2021 con un crecimiento del del 7%, su mayor ritmo de expansión desde 1969, después de haber sufrido una contracción del 8% en 2020.

Igualmente, Italia también ha crecido por encima de España, "cerca de un 6,5 %" interanual en 2021, después del retroceso del 8,9 % en 2020 por la pandemia de coronavirus, y avanzará al menos un 4 % en 2022, dijo este jueves el ministro de Economía italiano, Daniele Francom avanzando los datos oficiales que se darán a conocer este lunes.

Así, pese al optimismo del Ejecutivo, que pretende hacer creer a la población que la economía española va viento en popa, la realidad es bien distinta. Sí, se ha mejorado respecto a 2020, pero es que los datos de aquel año fueron demoledores, los datos del PIB se hundieron como nunca en los últimos 30 años, llegando a niveles de la Guerra Civil,  y, por mucho que se empeñe el Gobierno en decir lo contrario, todo ello, aún no se ha recuperado.

Todo ello, contando además, con el mayor estímulo económico que podría tener, la llegada de los fondos europeos, que debido a su incapacidad a la hora de gestionarlos, no están sirviendo de revulsivo para rescatar a una España hundida tras la pandemia.

Aún así, Moncloa sigue con su discurso y el Gobierno se empeña en mostrar su triunfalismo, eso sí, jugando, de nuevo, a ser optimistas de cara al futuro. El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, ha asegurado este viernes que 2022 va a ser un año de crecimiento "altísimo", superior al de 2021. ¿Otro pronóstico fallido?