Pánico en Almería: un inmigrante reincidente, a pedradas contra un supermercado

Angustiosos minutos los que tuvo que soportar una de las dependientas de un supermercado en el pueblo almeriense de Ruescas, en la comarca de Níjar. Un inmigrante, de origen subsahariano, comenzó a golpear con una piedra de grandes dimensiones el escaparate del establecimiento. Dentro, la mujer, desesperada y muerta de miedo, gritaba presa del pánico.

Y es que, tal y como apunta el Diario de Almería, esta mujer lleva meses sufriendo amenazas de este individuo, algo que ya ha denunciado a la Policía. En el vídeo se puede comprobar como esos gritos van de menos a más cuando el atacante consigue abrir la puerta del local y empieza a gritar a la mujer ya sin una barrera de por medio.

Por suerte, en ese momento no se encontraba sola dentro del supermercado y un cliente interviene para primero sujetar al inmigrante, después quitarle la piedra y por último sacarlo del establecimiento. En el final del vídeo se puede ver como llaman a la Guardia Civil, que llegó poco después al lugar y detuvo al agresor.

Finalmente solo ha habido que lamentar daños materiales y ni la dueña ni ninguno de los clientes sufrió daño físico. El juicio se está celebrando este jueves.

Aquí puedes ver el vídeo completo del ataque y al que ha tenido acceso el Diario de Almería.

Amenazas desde hace meses

La Voz de Almería ha tenido la oportunidad de hablar con la víctima de este ataque y confirman que las amenazas venían de lejos. Almudena Andújar, de 30 años, es una de las dependientas de este local familiar y fue la que grabó el vídeo. En su entrevista con este medio almeriense asegura que "al ver que en el supermercado estamos cuatro mujeres, siempre que entraba a comprar le decía a mi padre que nos quería a alguna y empezaba a golpear el mostrador".

De hecho, no es la primera vez que este inmigrante aterroriza a la familia y es que el pasado 16 de enero amenazó a Almudena cuando iba caminando por la calle con sus hijos. La cosa no queda ahí, y dos semanas después, este joven inmigrante irrumpió en el supermercado, se atrincheró dentro y amenazó de muerte a la dependienta.

Almudena denunció lo sucedido a la Guardia Civil y pidió una orden de alejamiento. Desde entonces, la mujer deja bloqueada por seguridad la puerta del negocio familiar que ha acabado destrozando el atacante. 

Como es normal, a Almudena le está afectando esta situación y ha expresado que sufre un cuadro de ansiedad y no puede dormir desde que comenzaron las amenazas. Además, ha avisado de que "si no se toman medidas, mañana podría ser otra mujer quien sufra estos ataques o incluso acabar con la vida de alguien".