Los secesionistas han amanecido este martes con la suspensión de la inmunidad a Puigdemont, pero también con la retirada del tercer grado para los encarcelados por el 'procés'.
El independentismo, que andaba exhultante tras el resultado de las elecciones catalanas, ve este martes como sus aspiraciones secesionistas que pretenden fragmentar el país se esfuman gracias a las instituciones y a la justicia. Pese a la negativa de Podemos, Puigdemont ya no gozará de inmunidad por su condición de eurodiputado y además, los jueces han anulado la semilibertad de la que gozan los presos independentistas, que tendrán que volver a prisión.
Así, Oriol Junqueras, Raül Romeva, Josep Rull, Jordi Turull, Jordi Sànchez, Jordi Cuixart y Quim Forn dejarán de gozar de los privilegios de los que gozán por estar acogidos al tercer grado y que han permitido que el líder de ERC acudiera a los mítines de la formación durante la campaña electoral.
La decisión ha sido tomada por el juzgado de Vigilancia Penitenciaria 5 de Cataluña que ha acordado este martes anular la progresión a tercer grado de los presos del 1-O en Lledoners (Barcelona), al estimar el recurso que la Fiscalía presentó en contra de su semilibertad.
Sin embargo, será el Supremo el que tendrá la última palabra sobre este asunto, pero, por el momento, los siete líderes independentistas deberán volver a la prisión, a la que sólo regresaban para dormir.
Esta decisión judicial supone otro duro golpe al independentismo, después de que este mismo martes el Parlamento Europeo acordase la suspensión de la inmunidad para el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, abriendo la puerta a que los juzgados belgas, que siempre han auxiliado al prófugo, atiendan, por fin, las órdenes del Supremo de extraditarle.
ERC amenaza con dejar de apoyar a Sánchez
Pero estas decisiones judiciales, también están teniendo su propia vertiente en el juego de alianzas del Gobierno, ya que pese a que Podemos se ha negado a levantar los privilegios de Puigdemont, los socialistas sí que lo han apoyado.
Por ello, el portavoz parlamentario de ERC, Gabriel Rufián, ha amenazado este martes con retirar su apoyo al Ejecutivo si sigue felicitándose por decisiones como esta. "Si siguen así lo acabaran celebrando en sus casas, y no en Moncloa", ha asegurado.
Además, también se ha referido al fin del tercer grado para los presos del procés y ha lanzado otro aviso a navegantes ya que ERC sigue siendo "imprescindible" para la gobernabilidad o no del país, dado que es la primera fuerza política catalana en el Congreso.