Pacto PSOE-ERC
8.500 militantes de ERC deciden por 48 millones de españoles el modelo territorial de España
Pedro Sánchez deja en manos de la militancia independentista, profundamente dividida y en guerra, el concierto fiscal a Cataluña que supone romper la solidaridad entre regiones
El modelo territorial de España, la forma de organizarnos de los últimos 40 años, con el debate de avanzar hacia un estado más confederal o no, no lo va a decidir ni usted ni yo ni el resto de los 48 millones de españoles. Ni siquiera los 8 millones de catalanes. Se ha convocado una votación, es verdad, pero no es un referéndum de toda España, sino que sólo votarán 8.500 militantes de ERC a los que Pedro Sánchez ha dado el poder de decidir por todos algo tan importante como un concierto fiscal y un privilegio a Cataluña.
Ni siquiera el propio Pedro Sánchez tiene la sartén por el mango, ya que los militantes de ERC, en un arrebato, podrían tirar al traste el acuerdo con el PSOE para investir a Salvador Illa presidente de la Generalitat de Cataluña a cambio de una Hacienda propia que recaude y gestione el cien por cien de los impuestos. O dicho de otro modo, que los catalanes reciban más dinero y aporten menos al Estado, cargándose la solidaridad con el resto de regiones.
España
Pánico de Gabriel Rufián: de llamar a Salvador Illa “el del 155” a suplicar el sí a su investidura
Enrique Martínez Olmos
En el mundo del independentismo catalán, acostumbrado a sobresaltos y giros de guion cada cual más surrealista y propios de una ópera bufa, todo es posible. Aunque la dirección de ERC ha tocado el pito para que los militantes voten sí al pacto con el PSOE que incluye el concierto fiscal, colectivos internos como el del Col·lectiu Primer d'Octubre llaman a votar no y no facilitar un gobierno de Salvador Illa.
Se suman las juventudes de ERC que amenazan hasta con que su diputada Mar Besses vote no a Salvador Illa en la investidura del Parlament aunque en la consulta a las bases gane el sí. Y el propio Oriol Junqueras, favorito para ganar el próximo congreso de ERC, no ha pedido el voto ni al sí ni al no, dejando entrever a sus seguidores que no está muy de acuerdo con el pacto con el PSOE.
Eso sí, a la dirección de ERC siempre le queda el recurso de hacerse un Nicolás Maduro y decir que ha ganado el sí sin mostrar las actas. La actual dirección en funciones que encabeza Marta Rovira se conforma con que gane el sí con un voto de diferencia. Eso ya les legitima para seguir adelante con el plan trazado con Pedro Sánchez, aunque se espera que la consulta a las bases refleje la profunda división que vive ERC. El resto, los 48 millones de españoles, esperaremos sentados a ver qué ocurre con nuestro modelo territorial por el capricho de 8.500 independentistas.