Derecho de Rectificación
La trampa de Félix Bolaños contra los influencers le sale mal: los opinadores sanchistas temen una reacción
El Gobierno anuncia que las personas con más de 10.000 seguidores podrán recibir rectificaciones para “combatir los bulos”… Pero el equipo de opinión también podrá ser objeto de esa exigencia legal y se espera una avalancha de 'efecto rebote'

El ministro de la Presidencia y Justicia, Félix Bolaños
El Gobierno de Pedro Sánchez está obsesionado en combatir las opiniones disidentes, y de ahí sus campañas contra los medios no afines tachándoles de ultraderecha, pseudomedios y difusores de bulos. En esta guerra, los influencers y youtubers son los más incontrolables: opiniones libres que tienen miles y hasta millones de seguidores. Así que Félix Bolaños se ha sacado de la manga que la gente pueda exigir rectificaciones legales a los influencers con más de 10.000 seguidores… Sin caer en la cuenta que esto es un arma de doble filo que puede herir a los propios opinadores afines al sanchismo.
En concreto, el ministro de Justicia y Presidencia, Félix Bolaños, anunciaba que el Consejo de Ministros había aprobado un anteproyecto de la Ley Orgánica Reguladora del Derecho de Rectificación que como novedad incluirá a aquellas personas que tengan más de 100 000 seguidores en una red social o más de 200 000 sumando todas las redes sociales.

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Félix Bolaños justificaba esta medida acusando a los influencers de que "hay profesionales del bulo y de la mentira que todos los días enfangan nuestro debate público con mentiras y con falsedades, así que contra ellos se podrá ejercer el derecho de rectificación por ciudadanos que se vean afectados por lo que publican", entrando en un terreno peligroso para que cualquiera denuncie a un influencer y le obligue a cambiar su contenido.
Más allá del eterno debate de qué es un bulo y si es aquello que no gusta al Gobierno para perseguirlo, ahora con lo influencers, a Félix Bolaños le recordaban que esta medida se le puede volver en contra y de forma bastante drástica. Es tan simple como que, si cualquiera puede pedir una rectificación por vía legal a los influencers, los miembros del equipo de opinión sanchista -todos ellos con más de 10.000 seguidores- pueden recibir una oleada de rectificaciones, muchas incluso como reacción a esta medida para que la vean en sus carnes.
El equipo de opinión sanchista ya se ha puesto en guardia ante la trampa de Félix Bolaños a los influencers, a ver si por ir de listo el Gobierno para intentar aplacar los estragos que la opinión libre de youtubers está causando en el relato oficial del Gobierno, provoca un efecto rebote que acabe con decenas de peticiones de rectificación a los bulos del propio Gobierno y de sus minions mediáticos.