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La soberbia de Sánchez toma por rehenes a los españoles

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el estand de Paradores durante su visita a FITUR.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el estand de Paradores durante su visita a FITUR.EDUARDO PARRA / EUROPA PRESS

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La estrategia gubernamental está clara. El decreto ómnibus no se toca. Si no se aprueba como está, el mes que viene los jubilados verán bajar sus pensiones, los afectados por la dana no recibirán las subvenciones, los ciudadanos sufrirán el precio más alto del transporte público y el SMI quedará en el limbo. Y toda la culpa de esto la tiene el PP de Alberto Núñez Feijóo que desea ver sufrir a los españoles y acabar con el escudo social que el Gobierno progresista de Pedro Sánchez ha ido tejiendo a lo largo de este tiempo atrás. En la misma línea, seguirán los contactos socialistas con Junts y Carles Puigdemont para convencerles de bajar del monte y volver al redil del “Frankenstein plus” que permitió la investidura.

En Ferraz, ahora mismo, contienen la respiración por el miedo que tienen ante lo que muchos mandatarios del PSOE consideran un error que van a pagar muy caro. Por mucho que los terminales mediáticos del 'sanchismo' clamen contra el PP, los españoles culpan a Sánchez de este guirigay por su soberbia y por la artimaña de mezclar hasta ochenta temas dispares en un decreto que, en realidad, era un trágala inasumible por la oposición. 

Creen muchos que lo que debería hacer La Moncloa es remangarse y apuntalar el edificio que amenaza ruina. Y avisan, además, que hacer cambiar de opinión a Puigdemont, habiendo llegado la cosa hasta el punto que ha llegado, le supondría a Sánchez tener que aceptar imposiciones de los independentistas muy difíciles de disfrazar ante la opinión pública.

Mientras, el PP mantiene con firmeza su postura. En estos primeros días son pocos los que le reprochan el voto negativo al decreto ómnibus. Más todavía, en las encuestas improvisadas que se han hecho, aparece la idea clara de que Feijóo ha acertado diciendo "hasta aquí hemos llegado". Igualmente, el mensaje que su secretaria general, Cuca Gamarra, repite poniendo el acento en que Sánchez ha tomado como rehenes a los españoles para que los populares se rindan, es un enorme acierto que está calando en amplios sectores. 

Gamarra, este sábado en un acto del PP de Extremadura, aclaró que ellos están dispuestos a aceptar el decreto si se vuelve a presentar "sin trampas": "El PP dice sí a la revalorización de las pensiones, pero no a la subida de impuestos. Dice sí a las ayudas a los usuarios de transporte público, pero no a la protección al okupa para que campe a sus anchas. Y dice sí a todos y cada uno de los afectados por la dana de Valencia, pero no a los privilegios y a las prebendas a los socios a cambio de votos", dijo la dos popular. Sánchez está ante un nudo Gordiano que aún puede debilitarle más.A.M.BEAUMONT

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