| 06 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Carles Francino, el día de su retorno
Carles Francino, el día de su retorno

El alegato viral de Carles Francino tras 40 días al borde de la muerte

El locutor de la Ser vuelve a antena tras un calvario que pudo costarle la vida. Sus primeras palabras provocaron lagrimones de emoción y se hicieron virales como nunca.

| Mr. Meme Opinión

Las primeras palabras de Francino tras 40 días al borde de la muerte from ESdiarioTV on Vimeo.

Hace 47 días, Carles Francino desapareció de los micrófonos de la Cadena Ser, donde dirige su exitosa "La Ventana", líder de audiencia en el tramo vespertino de la radio española. Los responsables de la casa le aconsejaron tomar esa decisión preventiva tras haber tenido un leve contacto con un contagiado. Se encontraba bien, no entendió la necesidad de dejar el estudio y estaba convencido de que se habían sacado las cosas de quicio.

Pero nada más lejos de la realidad: poco tiempo después empezó a sentirse mal y empezó una pelea para salvar su vida que ha durado 47 días. Al mordisco del virus se le añadió un ictus a consecuencia del COVID que le sumió en la batalla más decisiva que ha librado en 40 años de trayectoria.

 

No es de extrañar la expectación que suscitó su retorno este lunes. Ni cómo se ha hecho de viral su emocionante relato de la experiencia sufrida y de las lecciones que él ha aprendido tras sentirse como tantos otros ciudadanos que se han puesto al borde de la muerte o han visto morir a los suyos.

"Sin secuelas"

"Este puñetero virus no atiende ni a deporte, ni a razones, ni a nada. De hecho, a los cinco días de dar positivo tuve que ingresar de urgencia en la Fundación Jiménez Díaz con fiebre muy alta y oxígeno muy bajo. Las pasé canutas, sobre todo durante 48 horas en las que los indicadores eran malos, incluido un ictus del que, afortunadamente, parece que no me ha quedado ninguna secuela", dijo.

Entre lagrimones de su equipo y de la audiencia, el catalán dejó reflexiones válidas para todos y un emocionado agradecimiento, tras recordar cómo ha visto fallecer a familiares cercanos y él mismo se ha enfrenado a la parca: "Ha sido abrumador. Si el cariño fuera una hipoteca, yo estaría pagando plazos lo que me queda de vida".