¿Por qué Canal Sur no conectó con Doñana?

Se nos ha encogido el alma al ver arder el monte en Doñana, en esa Huelva que en esos momentos no quería saber nada de fandangos sino de supervivencia y solidaridad. En Matalascañas, las personas no podían volver a casa, conectaban con Canal Sur para tener información.

En la comunidad autónoma donde tenía lugar el desastre de Doñana, no había ningún programa especial que la urgencia exigía

En una televisión pública, en la comunidad autónoma donde tenía lugar el desastre ecológico, no había ningún programa especial que la urgencia exigía. Uno se encontraba con la repetición de un programa, Yo soy del Sur peques. Nos gusta y amamos la copla, las sevillanas, el fandango y sabemos que son terapia, pero prima la vida y no sólo la vida del ecosistema, del planeta que habitamos.

Incompetencia en Canal Sur

Seres humanos y especies animales en peligro. Se escapaba la vida y esta actitud de Canal Sur fue de una incompetencia y carencia de humanidad absoluta en un territorio que es el suyo, en ese sur cuyo nombre lleva su Canal. Joaquín Durán, director de RTVA, se lo ha tomado mal, como una ofensa. Y simplemente ha sido una crítica constructiva . Que ha hecho efecto.

Mejoría

Días posteriores han estado a la altura porque todo hay que decirlo. Fernando Díaz de la Guardia, de informativos de la mañana, en el lugar, in situ. Norberto Javier, de la delegación de Huelva y muchos otros profesionales al pie del cañón. Tanto Toñi Moreno en su programa como Juan y Medio a la tarde, han conectado a lo largo de su programa y han informado.

Una rectificación

Y hay que decir lo bueno y lo malo, lo justo y lo injusto, lo natural y antinatural, lo ético y lo no ético. Rectificar es de sabios y lo han hecho. En estas situaciones se dan ataques de ansiedad, angustia, lipotimias y problemas respiratorios que, aunque sean somáticos, el estrés psicológico puede aumentarlos.

Mucha más angustia ante la desorientación, cuando no se sabe, cuando están cortadas las vías de salida a sus domicilios. Y lo peor: el fuego y las llamas, además del aire contaminado, pueden cercar lugares y personas. 

Aquí está la labor tranquilizadora de una información veraz que paliará el estrés y muchas somatizaciones y ansiedades. Es un rayo de luz en la oscuridad, esperanza de que todo está en orden y pronto se solucionará. Y en estas situaciones críticas no vale la terapia del flamenco, sí la de la información.

Pilar Enjamio es psicóloga