| 28 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse

"Tengo miedo a alquilar":La Ley de Vivienda destruye el 30% de de los alquileres

Desde la entrada en vigor de la Ley de Vivienda también ha dinamitado el sector con un 22% de inmobiliarias valencianas que renuncian al negocio del alquiler.

| Sonia García Edición Valencia

El precio de los alquileres en la Comunidad Valenciana se ha disparado hasta valores disparatadamente inasumibles. Desde la entrada en vigor de la Ley de Vivienda aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez el valor de los alquileres ha subido un 15%. Detrás de esta crecida no solo se encuentra la inflación, sino una enorme caída de la oferta de inmuebles en oferta. Desde que se aprobó la Ley, criticada por desproteger al propietario frente a posibles ocupaciones ilegales, ha desaparecido una tercera parte de los alquileres en oferta. "Tengo miedo a alquilar", confiesa uno de los valencianos a ESdiario que mantiene su segunda propiedad vacía. 

El estudio realizado por la Federación Nacional de Asociaciones Inmobiliarias (FAI) y la Asociación de Inmobiliarias de la Comunitat Valenciana (ASICVAL), que evidencian un fuerte desequilibrio en el mercado del alquiler tan solo cinco meses después de aprobarse la norma.

En Alicante es donde más se ha resentido la oferta (-40,47%) y también donde más ha subido el precio del alquiler de vivienda habitual (16,07%), seguida de Valencia y Castellón con un descenso del 29,9% y el 23,84%, respectivamente, y un aumento de las rentas del 14,84% y del 13,26%, respectivamente.

"Ninguno quiere alquilar por miedo a que le ocupen la casa y luego no pueda ni tirarlos", valora un propietario confesando que ese es su caso y que tiene más de una vivienda en propiedad y "no la alquilo". Se lo plantearía si exigiera "bastantes más garantías" y sobre todo "que se pudiera hacer más rápido, que no se puedan meter en tu casa y por el mero hecho de un alquiler luego no puedas ni tirarles a la calle". 

"Hay temor porque no sabes que puede pasar con el piso, por miedo a que no te paguen a que te puedas destrozar el piso", cuenta una propietaria de Valencia. Ella prefiere mantener el precio bajo a su antigua inquilina porque "preferimos mantener el precio a los inquilinos con los que estamos contentos a subirlo y que haya algún problema". 

La desconfianza hacia los inquilinos potenciales se traduce en mayores exigencias y requisitos. Ante la desprotección de la Ley, los propietarios buscan garantías por su propia cuenta, en algunos casos, sobrepasando el límite de la legalidad. Una joven argentina vino a vivir a Valencia hace unos meses y cuenta a ESdiario las dificultades que se encontró ala hora de buscar dónde vivir con el panorama actual: "Está muy difícil, te piden muchos requisitos, nómina, avales, seis meses por adelantado o hasta un año", cuenta una joven argentina, quien además lanza un aviso a aquellas personas inmigrantes que quieren vivir en España: "No recomendaría venir y alquilar una casa sola". 

"Hoy en día es preciso pedir garantías porque, o conoces a quien te lo alquila y tienes confianza, pero así y todo sé de casos que pese al buen aspecto aún así han dejado de cumplir con sus responsabilidad así que hay recelo a la hora de alquilar porque te pueden pasar a okupas", valora una de las arrendadora encuestadas por ESdiario, quien lamenta que "lo que ocurre en España con los okupas no ocurre en ningún otro sitio, parece que vayan a favor de quienes incumplen las normas de convivencia". 

Además, la subida del precio se traduce en la reducción de los metros de vivienda que se puede alquilar con el 30% del salario bruto mensual. La brecha se ha agrandado en los últimos diez años y, con el mismo salario, se pueden adquirir viviendas la mitad de pequeñas. Concretamente, la reducción en el territorio valenciano es de las más altas de España con un -52% del tamaño de la vivienda. Si antes con ese presupuesto se podía alquilar un inmueble de 107 metros cuadrados, ahora a penas sobrepasa los raquíticos 51 metros cuadrados. "Nosotros pagamos 920 euros por un piso de 100 metros cuadrados, pero tenemos mucha suerte porque ha subido el precio y los precios alrededor están ya en 1.300 euros", cuenta a ESdiario un arrendatario de Valencia.

Por eso la opción de compartir piso se convierte en la única vía posible para muchos valencianos. El citado estudio recoge que el 22,93% de las inmobiliarias señalan que ha aumentado la demanda de alquiler de habitaciones "Somos 4". "Comparto piso y no me planteo irme solo con estos precios". Otros directamente, no ven posible independizarse. "Ni de coña", expresa un valenciano en declaraciones a ESdiario. "No me sería viable vivir solo", añade. 

"Ahora imposible independizarme, ni me lo he planteado porque con el sueldo que tengo no puedo invertir más del 50% del sueldo en un alquiler como son los 800 o 900 euros", cuenta otro joven entrevistado. Como él, el 87% de los menores de 30 años viven con sus padres. La vergonzosa tasa de emancipación juvenil se encuentra en solo un 13'4% en el caso de la Comunidad Valenciana y del 15'5% a nivel nacional.

La Ley dinamita el negocio de las inmobiliarias valencianas

Esa es la realidad a la que se enfrentan los españoles, propietarios desamparados ante la Ley con miedo a alquilar y arrendatarios con hogares cada vez más pequeños y más caros. Pero la situación trasciende también al negocio del mercado inmobiliario, que sufre las consecuencias. 

Los inmuebles en alquiler desaparecen del mercado y también de la cartera de ofertas de las agencias inmobiliarias. El 22,66% de las inmobiliarias valencianas afirma que ha tenido que renunciar al negocio del alquiler ante la nueva realidad que ha impuesto la Ley de Vivienda, porcentaje que se eleva al 38,46% en el caso de las inmobiliarias alicantinas. Sin embargo, la decisión de esta medida es menor entre las inmobiliarias de la provincia de Valencia (19,08%) y Castellón (17,64%).