La ‘bicifestación’ contra el túnel de Pérez Galdós con sólo 30 personas ha sido la última muestra de que la izquierda no logra movilizar en la calle con los temas con los que ataca
Año nuevo, vida nueva. Desde el 28 de mayo se han cambiado los papeles en el Ayuntamiento de Valencia tras el resultado de las urnas que provocó un vuelco a la derecha. Pero algunos llevan mejor esta nueva etapa que otros. La actual oposición, protagonizada por Compromís y PSOE, no ha logrado despegar o encontrar la tecla para erosionar al nuevo gobierno de María José Catalá.
La prueba está en las concentraciones a las que va o anima a ir tanto PSOE como Compromís: escasa asistencia de vecinos de Valencia. Ambos partidos han hecho por ejemplo de la eliminación del túnel de Pérez Galdós uno de sus principales motivos de oposición. Pero las propias fotos que distribuyen muestran que este asunto no preocupa a casi nadie.
En la bicifestación convocada por la asociación Fuera Túnel, acudieron unas 30 personas únicamente. Entre ellos la concejal del PSOE, Elisa Valía, y los concejales de Compromís, Papi Robles y Giuseppe Grezzi. Pero sólo una treintena de vecinos. Un pinchazo total. La cuestión es que no es la primera vez, pues han hecho más concentraciones con idéntico resultado, la escasa asistencia de gente.