Chequia por todo lo alto: miradores y estaciones de esquí

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Victoria Peñalver

@demayorcomotu

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Creado: 09.01.2025 | 16:00

Actualizado: 09.01.2025 | 16:00

Lejos del bullicio de Praga, Chequia guarda tesoros invernales que sorprenden por su autenticidad y encanto. Entre las atracciones más destacadas de este país se encuentran sus miradores, estructuras que, antiguas o modernas, de madera o metálicas, se alzan entre los árboles en muchas de sus ciudades, parques naturales y estaciones de esquí. Estas plataformas, pasarelas, puentes y toboganes están diseñados para ofrecer unas vistas impresionantes, permitiendo contemplar el entorno desde las alturas, por encima de las copas de los árboles, casi entre las nubes, muchas de ellas incluso en invierno.

Además, Chequia combina a la perfección el deporte y el bienestar. Las acogedoras pistas de esquí alpino y de fondo se entrelazan con paisajes de cuento, balnearios históricos y actividades para todos los gustos. Aunque las estaciones de esquí no son tan grandes como las de los Alpes o los Pirineos, destacan por ofrecer un ambiente más familiar y accesible, ideal para quienes prefieren evitar las multitudes, explorar nuevos territorios y disfrutar de la abundante y excelente calidad de la nieve.

Aquí, cada rincón invita a vivir experiencias diferentes y a maravillarse con actividades nuevas y vibrantes. Desde las ciudades hasta los parques naturales y estaciones de esquí, Chequia te sorprenderá con su mezcla de naturaleza, tradición y vistas que quitan el aliento. Déjame presentarte algunas de ellas en cinco de las regiones del país.

Región de Karlovy Vary

Dos de las estaciones de esquí alpino más destacadas de Chequia se encuentran aquí, al noroeste del país. Son Klínovec, con 32 km esquiables y un forfait compartido con la alemana Fichtelberg, que aporta al dominio otros 16 km más, y Plešivec, una opción más pequeña con 12 km. Puedes completar tus días de esquí en Jáchymov, un balneario histórico, que invita a la relajación. A sólo 70 kilómetros, Mariánské Lázně ofrece 90 km de pistas de esquí de fondo rodeadas del bosque de Slavkov, un club de golf y balnearios centenarios.
En la ciudad de Karlovy Vary, destaca el mirador Salto del Ciervo (Jelení skok), situado en la cima de una roca, justo encima del centro termal. Construido en 1804, este mirador de madera, coronado por una estatua de hierro de un ciervo, ofrece vistas únicas de la ciudad y sus alrededores. Puedes llegar a él subiendo por los senderos forestales o utilizando el funicular Diana, que conecta el Grandhotel Pupp con la estación intermedia.

Región de Hradec Králové

El sistema montañoso de Krkonoše (Montañas de los Gigantes) cuenta con tres de las estaciones de esquí alpino de mayor renombre del país. Por un lado, Špindlerův Mlýn (28 km esquiables) y por otro dos estaciones que ofrecen un fortfait conjunto, SkiResort Černá hora – Pec y Pec pod Sněžkou, que forman un total de casi 32 kilómetros esquiables.
Los que prefieren el esquí de fondo, tienen la Krkonošská Magistrála, una pista que atraviesa valles, bosques y preciosos pueblos nevados. Un plan muy divertido para toda la familia es subir al mirador que se erige por encima de la copa de los árboles, el Camino de Madera (Timber Trail) de Krkonoše. Los más aventureros, el parapente en Rokytnice nad Jizerou es una gran opción. Y, para todos, una alternativa perfecta es la ciudad balnearia de Janské Lázně, que forma parte de la estación de esquí Černá hora. Sumergirse en una de sus piscinas termales, pasear por el centro con sus históricas arcadas o realizar una excursión hasta el nacimiento del río Elba o a Sněžka, la montaña más alta de la República Checa, son otras opciones igual de apetecibles.

Región de Bohemia Meridional

Al sur del país, casi frontera con Austria, la estación checa de Lipno, cuenta con 13 km esquiables y vistas al mayor embalse del país, que en invierno se convierte en una inmensa pista de patinaje, la más larga del mundo.
Muy cerca se puede seguir gozando de vistas increíbles en el sendero entre las copas de los árboles (Tree Top Trail Lipno), que alcanza hasta 24 metros sobre el suelo y termina en una torre mirador de 40 metros de altura, desde donde se puede descender en el tobogán más largo del país, una experiencia divertida y emocionante para todas las edades.
Más al oeste, en Šumava, los esquiadores de fondo disfrutarán de paisajes de bosques y lagos glaciares en los alrededores de Zadov, Modrava, Kvilda y Churáňov, mientras que los aficionados al esquí alpino y el snowboard podrán optar por la pequeña estación de Špičák, en Železná Ruda.

Región de Pardubice

En Dolní Morava, junto al puente peatonal en suspensión más largo del mundo (Sky Bridge 721), se encuentra una pequeña, pero completa estación de esquí, Dolní Morava – Králický Sněžník, con 30 kilómetros de pistas y la mejor pista de ski cross del país. Destacan la Mammoth, la pista de bobsleigh más larga de Chequia (3 km), el Parque Infantil de Esquí Mamutík, un snowpark y un snow cross trail.
Aprovecha tu visita a esta región para traspasar su puente colgante, subir al mirador Camino por las Nubes (Stezka v oblacích) y visitar el castillo renacentista de Velké Losiny, un pueblo mágico en el que se realizaban los juicios de brujas. 

Región de Moravia-Silesia

En las montañas Beskydy, al norte de Moravia, se encuentran las rutas de esquí de fondo Hostýnská Magistrála y Beskydská Magistrála. La primera incluye el Santuario de Hostýn y el pintoresco pueblo de Štramberk donde su torre medieval, su arquitectura de madera, la cervecería local y sus famosas “orejas”, un dulce local, son buenos incentivos para una tranquila visita. La segunda conduce al ascenso a Lysá Hora, la cumbre más alta de Beskydy con impresionantes vistas panorámicas.
Además, quienes busquen disfrutar de una experiencia única, no pueden perderse el mirador Sendero de Valaška (Stezka Valaška). Este sendero elevado entre las copas de los árboles ofrece una vista privilegiada de los bosques circundantes y las montañas, culminando en una plataforma acristalada que parece flotar en el aire. Una actividad perfecta para todas las edades que combina aventura y paisajes espectaculares.

Desde balnearios históricos hasta aventuras en la nieve, estas cinco regiones de Chequia ofrecen un invierno lleno de contrastes y sorpresas, ideales para quienes buscan algo más allá de Praga.