Terremoto en "El País": Prisa cesa a Antonio Caño y encumbra a Soledad Gallego

Era un clamor en las últimas horas. Nuevos tiempos políticos obligan a nuevos tiempos mediáticos, ha debido pensar la cúpula de Prisa, revolucionada recientemente por sus accionistas con la salida del histórico Juan Luis Cebrián y su sustitución por Manuel Polanco.

Pero por si fuera poco el maremoto interno en la editora del diario El País y la Cadena Ser, el vuelco político tras la llegada de Pedro Sánchez a La Moncloa ha forzado también el vuelco en la dirección del histórico rotativo, icono de la izquierda española. En las próximas horas Antonio Caño abandonará el despacho principal de la sede madrileña de Miguel Yuste y su relevo esta prácticamente decidido: Soledad Gallego-Díaz, una histórica de aquella casa.

Con un crisis financiera enorme y un desapego creciente de sus lectores, El País había virado en los últimos tiempos a su derecha, después de que muchos vieran la mano de la exvicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, en las operaciones financieras destinadas a evitar su quiebra. Y otros muchos habían denunciado además una cierta complicidad con Ciudadanos.

Para revertir la situación, Soledad Gallego Díaz, histórica periodista del diario, ha confirmado a EFE que le han propuesto tomar las riendas de la cabecera. Si se confirma, será la primera mujer al frente de El País desde su fundación en 1976. Le han precedido el propio Cebrián, Jesús Ceberio, Joaquín Estefanía, Javier Moreno y Antonio Caño.

Caño, nombrado director en 2014, fue previamente corresponsal jefe del diario en Estados Unidos. El veterano periodista aterrizó en la redacción para sustituir a Javier Moreno, quien accedió al cargo en 2006.

Según fuentes de Prisa, la nueva cúpula de la empresa pretende "reconciliarse" con su lector tradicional y "pacificar" una redacción a la que Caño ha tensionado en varias ocasiones. Gallego-Díaz, respetada entre los periodistas del diario, acaba de ser reconocida con el Premio Ortega y Gasset a la Mejor Trayectoria Profesional.

Ahora,  como marcan las normas internas de El País, la redacción deberá votar esta propuesta y, una vez que cuente con su visto bueno, será ratificada por el Consejo de Administración de su editora.