La “desesperada” solución de Carlos Herrera ante un Gobierno con Unidos Podemos

Las encuestas israelitas o los sondeos realizados el mismo día de las Elecciones pero no a pie de urna -como en el caso que encargaron ABC y COPE- iban circulando de teléfono en teléfono, de whatsapp a whatsapp, desde las 6 de la tarde, a pesar de estar “embargados” teóricamente hasta las 20 horas, momento del cierre de los colegios electorales. Los “avances” de los resultados no sorprendían porque básicamente eran idénticos a los reflejados en las encuestas realizadas antes y durante la campaña. Una pírrica e insuficiente victoria del PP, la confirmación del sorpasso gracias a un fortísimo Pablo Iglesias y técnica mayoría absoluta para el bloque de la izquierda: habemus gobierno populista, auguraban los expertos y analistas en vista de lo ofrecido por las israelitas. 

En los estudios centrales de COPE en Madrid, el conductor del programa especial electoral, Carlos Herrera, llegaba pasadas las 6 de la tarde. El sondeo de GAD3 le quemaba en las manos. La encuesta telefónica, realizada a 4.000 personas al final de la campaña electoral, otorgaba al PP una horquilla de entre 121 y 124 escaños. Tras el PP aparecía ya Unidos Podemos con entre 87 y 89 diputados, por delante del PSOE que habría obtenido, según el sondeo que ofrecía la cadena, entre 84 y 86. Curiosamente la encuesta sí acertaba con Ciudadanos al que le otorgaba un margen entre los 29 y 32 parlamentarios. 

En vista de estos resultados (hacia una pausa trágica), a uno le quedan dos soluciones: en una mano el Pasaporte y en la otra el Título de Propiedad de tu finca o vivienda…

Carlos Herrera decía, al leer el sondeo propio y las israelitas para TVE y FORTA, al equipo allí congregado (José Luis Pérez, Ángel Expósito, Juan Pablo Colmenarejo…) lo mismo que una hora después repetía en antena a todos los oyentes: “en vista de estos resultados (hacia una pausa trágica), a uno le quedan dos soluciones: en una mano el Pasaporte y en la otra el Título de Propiedad del Registro de tu finca o vivienda…”.

Una sentencia que provocaba la risa en el estudio porque -aunque esa reacción ya la habían escuchado de Herrera- pocos esperaban que se atreviese repetirla con los micrófonos abiertos. Inmediatamente, Carlos Herrera mandaba a Ángel Expósito a la sede electoral de Unidos Podemos para dar cuenta de un ambiente. Minutos después Expósito describía, ya en el salón Goya, el ambiente de euforia en la sede podemita, una euforia que se esfumó casi tan rápido como se consumieron los selectos canapés que los morados habían preparado para la prensa.

Finalmente y a medida que iba avanzando el escrutinio, el verdadero resultado electoral se empeñó, de nuevo, en dejar mal a los demóscopos y ya con los resultados electorales en las manos los análisis lógicamente tomaron otros derroteros, pero siempre planeando en el ambiente el “susto inicial de la tarde”.

Tanto es así que al día siguiente, en el programa matinal Herrera en COPE, el siempre ácido contertulio José María Fidalgo bromeaba al ser preguntado por su análisis electoral y decía: Carlos, en primer lugar,  enhorabuena, estarás contento por el resultado del domingo… lo digo por la victoria del Cádiz. Y es que el equipo amarillo había ascendido a Segunda División tras vencer en el playoff al Hércules de Alicante.