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Irene Montero naufraga ante el ministro Catalá y deja desmoralizado a Podemos
Los diputados de la formación morada han comprobado de nuevo que no hay forma de que su portavoz se imponga a un miembro del Gobierno en la sesión de control.
Se las prometía muy felices este miércoles la bancada de Podemos con la pregunta que su portavoz se había reservado en la sesión de control al Gobierno. Su objetivo era el ministro de Justicia, Rafael Catalá, y el argumento el informe de la Fiscalía sobre la primera causa del caso Gürtel. Pero Montero pareció olvidar lo obvio del proceso judicial, que es el juez y su sentencia el que tiene la última palabra.
La portavoz morada volvió a llamar "ladrones" a los implicados en el sumario -sin sentencia firme aún-, exigió al PP que "devuelva hasta el último euro robado" e instó al Gobierno a "volver a la legalidad".
#SesiónDeControl @Irene_Montero_, de @PodemosCongreso, pregunta a @RafaCatalaPolo cómo asegurará la reparación social de la trama Gürtel pic.twitter.com/4xFVsc00gL
— Congreso (@Congreso_Es) 8 de noviembre de 2017
Pero, en su réplica, el titular de Justicia dio una lección básica de derecho y de separación de poderes que sonrojo a los diputados de Pablo Iglesias, que ser habían crecido con la intervención de Montero.
"Bienvenidos a la confianza en la Fiscalía, parece que solo confían en ella cuando beneficia a sus intereses", comenzó Catalá, insinuando la doble vara de medir de Podemos, por ejemplo con la actuación del Ministerio Público contra los responsables del desafío independentista. "Nosostros no dictamos sentencias, creemos en la presunción de inocencia", continuó. Y, remachó, "nadie debería usurpar las funciones que solo corresponden a los jueces y a los fiscales, no a los diputados".
Y remató a Montero e Iglesias con un dato del último informe de Amnistía Internacional. "El verdadero riesgo para la democracia es el populismo, ese es el verdadero riesgo de la democracia", sentenció.
