Errejón quiere usar la bandera de España en su campaña como el gran patriota

"Seremos antídoto ante la abstención y el bloqueo". En esas dos direcciones quieren trabajar Íñigo Errejón y los miembros de Más Madrid una vez decidida su irrupción en las elecciones generales.

Por una parte, servir de estímulo para todos esos votantes de izquierdas que estaban valorando quedarse en casa el 10-N ante la decepción generada por el pacto imposible entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Por la otra, alumbrar una izquierda a la izquierda del PSOE más pragmática y posibilista. 

Los militantes de Más Madrid se reúnen este miércoles por la tarde en la sede de UGT (el brazo sindical del PSOE, no es casual) para decidir en qué circunscripciones presentarán candidaturas, además de en Madrid. Será en las grandes, en las que más escaños se repartan y por tanto haya menos restos electorales. Y también dependerá de las alianzas que tejan, como con Compromís. 

Todo ha sido tan precipitado que el partido no tiene ni nombre, ni oferta programática, ni candidatos. Quieren distanciarse de Unidas Podemos, tienen que hacerlo en tiempo récord y no saben cómo. 

Una de las opciones que barajan los de Errejón es dar un golpe de efecto revolucionario y utilizar la bandera de España en su carrera electoral para unir dos conceptos: izquierda y patriotismo. No obstante es una idea que forma parte del debate interno, por ahora nada definitivo.  

En alguna ocasión el líder de Más Madrid ya ha mostrado su pesar por la patrimonialización que, a su juicio, la derecha hace de los símbolos nacionales en España. Algo que él atribuye a una secuela del franquismo. 

"Cometeríamos una enorme torpeza histórica si regalamos el orgullo de pertenencia al país a quienes tiene una idea muy estrecha de España en el que les sobran los progresistas, los que hablan otra lengua, los que vienen de fuera, los que tienen otro apellido, las feministas... Su idea de patria es estrecha y egoísta; en la mía caben ellos también. Hay que disputarles la idea de España (...). Tenemos que empezar a sentir como propios los símbolos nacionales. ", señaló en diciembre en una entrevista en CTXT. 

De momento, y hasta este miércoles por la tarde, Errejón guarda silencio, aunque se da por seguro que será él quien encabece la legislatura. Este martes estuvo en la Junta de Portavoces de la Asamblea de Madrid, pero se las ingenió para entrar por otra puerta y dar esquinazo a la prensa. Y luego no fue él quien compareció ante los periodistas, sino el presidente de su grupo parlamentario, Pablo Gómez Perpinyà. 

En Más Madrid hay quienes están convencidos del paso que van a dar, pero a otros les produce vértigo.