Fake Government

Cada vez que subo un vídeo de los míos, de esos que acostumbro aderezar con unas cuantas pizcas de ironía, a las redes sociales observo atónita cómo tan solo unos instantes después de la subida aparece en muchos de ellos un enlace que reza "obtén más información sobre el Covid-19".

Basta mencionar el Covid-19 en el sentido que sea para que la red social en cuestión te redirija a una página convenientemente preparada con el fin de que nunca pierdas de vista, valga la redundancia, el punto de vista gubernamental.

No se puede cuestionar abiertamente, sin ironía ni doble sentido, la gestión de la pandemia por parte del Gobierno sin correr el peligro de que tu vídeo desaparezca de las redes. Le pasó a Infovlogger y espero que no me pase a mí.

Y, sin embargo, el mismo cartelito de "información sobre el Covid-19" por alguna razón no salta debajo de las declaraciones de los que tienen el privilegio y, se supone que también la responsabilidad, de gobernarnos. Nadie habló de negacionismo cuando Pablo Echenique negó en Twitter la gravedad de la pandemia a la que nos enfrentábamos. Así como nadie puso el grito en el cielo cuando en vez de "como mucho uno o dos casos" de repente empezamos a contar decenas de miles de fallecidos.

Frente al pseudoperiodismo de los reporteros con mascarilla, frente al clickbait del "vamos a morir todos", frente a la extrema derecha pidiendo cierre de fronteras por una gripe menos agresiva que la de todos los años, el rigor y la profesionalidad de Lorenzo Milá. pic.twitter.com/hwjWBF9uIr

— Pablo Echenique (@PabloEchenique) February 25, 2020

Como tampoco se habla de irresponsabilidad política por las últimas declaraciones de Alberto Garzón, que acaba de afirmar que no está acreditado que las mascarillas FFP2 protejan mejor, estando ese hecho tan acreditado como que esas mascarillas son las más aconsejadas por la Unión Europea y obligatorias en países tan punteros en eso de la lucha contra el Covid como Francia y Alemania.

Pero como las regaló Ayuso en Madrid no pueden ser buenas. Pues es preferible no darle nunca la razón a nadie del PP (menos aún si viene de Madrid) a salvar vidas. Así que Alberto lo dice y no le salta ningún cartelito de "cuidado, peligro público: ministro de Consumo pontificando sobre Sanidad".

Tenemos un Gobierno lleno de expertos en distorsionar la información

Ojalá más que una ley contra las fake news tuviesen el cuajo de aprobar una contra el Fake Government. Un Gobierno lleno de expertos en distorsionar la información a su antojo con tal de garantizar su supervivencia. Uno capaz de quitarle la razón a Isabel Díaz Ayuso en no querer confinar Madrid, alegando peligro de contagio masivo, y a la vez celebrar las elecciones catalanas con el doble de incidencia acumulada (aún habiendo aplazado las gallegas y las vascas con una incidencia dos veces menos). Uno muy preocupado porque no se desinforme a la ciudadanía y poco o nada interesado en saber si esa ciudadanía tiene para comprar un paquete de arroz el día de mañana.

El Gobierno de la gente... de la gente que por presidir miente. O dicho de otra forma, que por no dejar de presidir, lo mínimo que hace es mentir.