María Jesús Montero allana el terreno para no dejar ninguno de sus cargos y liderar el PSOE andaluz

La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quiere apagar las críticas que existen por su intención de liderar el PSOE andaluz sin renunciar a sus cargos en el Gobierno de Pedro Sánchez. Tanto desde el PP, como su único rival en las primarias de la federación andaluza, el catedrático Luis Ángel Hierro, han exigido a Montero que abandone sus responsabilidades y se dedique en exclusiva a dirigir el partido, inmerso en una crisis interna y de respaldo ciudadano, así como asumir la labor de oposición al Gobierno de Juanma Moreno (PP-A).

Pero, la también vicesecretaria general del PSOE se niega a renunciar y utiliza una estrategia para aplacar los ánimos en las filas socialistas. Para ello ha trasladado a su contrincante su disposición a "trabajar juntos" tras el proceso interno de recogida de avales y primarias para culminar en el Congreso Regional que se celebrará los días 22 y 23 de febrero en Armilla (Granada).  Además, María Jesús Montero ha insistido en que si, finalmente, resulta elegida nueva líder de los socialistas andaluces, tiene la intención de crear "equipos" que le permitan también compatibilizar esa nueva responsabilidad con sus actuales cargos institucionales.

En una entrevista con Canal Sur Televisión, la ministra sevillana ha insistido en que una de las claves para compatibilizar cargos es crear "equipos": "Yo soy una persona de equipos, delegando tareas y teniendo también la capacidad de hacer un esfuerzo personal en tu vida cotidiana". 

Así que trata de zanjar la polémica por sus 'multicargos' tendiendo la mano a su rival Luis Ángel Hierro como muestra de integración, al mismo tiempo que ha apuntando que no será ni la primera ni la última en España que se encuentre en esa situación y ha recordado "precedentes" en esta comunidad como el caso de Javier Arenas, que era el líder del PP-A y formaba parte del Gobierno central.