El "bofetón" del Emérito a Bárbara Rey se escucha desde Abu Dabi

El padre del Rey de España ha cumplido 87 años. Y la fiesta ha sido de lo más destacada y a lo grande en Abu Dabi. Un homenaje en toda regla con el que lo han agasajado sus amigos de Emiratos Árabes. Una invitada especial, la mallorquina Marta Gayá. Uno de los verdaderos amores de Juan Carlos I durante décadas. Una relación paralela a su matrimonio con la Reina Sofía y con la que mantuvo una relación estrecha, divertida, comprometida y mucha complicidad. Días de vino y rosas en Palma de Mallorca.

La relación que mantuvo Don Juan Carlos con Marta Gayá nada tiene que ver con su relación con Bárbara Rey. No es lo mismo acostarse en la misma cama que levantarse. Diferencia notable. Sobresaliente. Se pinte como se pinte, las dos relaciones estaban pactadas.

La gran invitada a la fiesta del 87 cumpleaños del Emérito ha sido ella. No Bárbara. Es Gayá. Allí estaba. Y con mucha intención. No por ella sino por el otro. Las otras aún no han hablado. No lo harán. Marta también. No por bien pagadas sino por coherencia. Fueron amores verdaderos y también clandestinos. Silenciosos. No silenciados.

Marta Gayá fue la mujer que consiguió que el escritor José Luis de Vilallonga fuese el primer biógrafo de Juan Carlos. En oficio, el Rey. Sin ser Emérito. La primera vez que se le puso cara en los medios de comunicación a Marta fue en el funeral del escritor en agosto de 2007. Allí estaba Gayá en la capilla ardiente. Pocos la conocían. Del medio. Quiso despedirlo junto a la viuda de Vilallonga, Selian. La que estuvo hasta el último día a su lado. Begoña Aranguren fue su primera esposa y sus últimos suplicios. Según versión.

Aquel 31 de agosto de 2007, Marta Gayá de luto riguroso se hallaba en el tanatorio de Palma de Mallorca para despedir a un amigo. Muchas confidencias entre los tres. Aquel 31 de agosto de 2007 fue el principio del fin del programa Aquí hay tomate, cuando se hizo pública la cara de Marta. El 1 de febrero de 2008 el programa que presentaban Jorge Javier Vázquez y Carmen Alcayde sea encontraba de funeral. El final de Aquí hay tomate.

La mallorquina ha vuelto a los eventos del Rey Juan Carlos. Con discreción. Sin protagonismo. Y sin necesidad de boato. Como ha hecho la otra. 30 años insinuando para un final más bien cantado. Quien habla en bambalinas lo hace en el proscenio. Marta Gayá ha estado en el cumpleaños del amigo y del Rey Emérito de España.