“Ha tocado fondo”: alarma por el estado crítico de Camilín, el hijo de Camilo Sesto

Malas y delicadísimas noticias las que, en los últimos días, se están trasladando a los medios de comunicación desde el entorno de Camilo Blanes Ornelas, que tiene 41 años, hijo del legendario artista Camilo Sesto. La preocupación por la salud del que todos llaman Camilín es un hecho, y en el último tiempo está arreciando con especial intensidad, tal y como recoge Jaleos del Corazón en una información de este viernes 21 de febrero.

Según esta información, Camilo hijo ha tocado fondo y es una realidad que su madre, Lourdes Ornelas, está desesperada y pasaría días sin saber de él. Siente “impotencia” ante una situación que comprende que no puede controlar tanto como le gustaría. Como madre, Ornelas sabe que ha hecho todo lo que ha podido, pero no es suficiente.

Nunca lo es para una madre. Por eso ella persiste en tener localizado a su vástago y no pasa un día sin saber cómo está. Al menos, lo intenta, como deslizan a este periódico. Cierto es que estas palabras, y esta crudísima realidad, no es nueva; llueve sobre mojado, recoge el citado portal.

Pero si bien antes había más control sobre Camilín, hoy aquel extremo no existiría. Camilo hijo "ha perdido el contacto" con las pocas personas de la familia que “lo querían bien”.

Además, Jaleos cuenta el lamentable estado en que se encuentra la casa donde vive: Basura desparramada por el terreno, desperfectos y mucha dejadez en las instalaciones de la casa.

Una circunstancia que demuestra "hace mucho tiempo" que el personal doméstico que tenía contratado Camilo Sesto -antes de morir en 2019- ya no acude a su trabajo. Se desconoce si fueron despedidos o si abandonaron el puesto de forma voluntaria.

También se ha interpretado como una señal de alerta en su entorno el hecho de que Camilo hijo haya eliminado sus redes sociales, en las que se hacía llamar Sheila Devil.

“Mal que bien se le tenía controlado por el Instagram, pero ahora ya ni eso”, se apunta. En otra línea, Diego Arrabal habló hace unos días de la reaparición de Camilín.

Preocupante y alarmante estampa, en la línea de la que él ha transmitido en sus redes: con heridas en las rodillas y los codos, sin dormir y con una botella de vodka en la mano.

La fotografía de la que habla Diego Arrabal data del pasado viernes, 14 de febrero. “Ese día vieron a Camilín entrando en una tienda de chucherías que hay en la calle Julián Gayarre, en el barrio de El Retiro, en Madrid. Esta tienda está al lado de una clínica estética. Estaba él solo, con una pinta un poco extraña. Iba con una peluca rubia. Serían las 12:30 horas, aproximadamente”, informa Arrabal.

“Con el frío que está haciendo en Madrid, llevaba manga corta y vaqueros rotos. (...) Yo pensaba que ojalá estuviera ingresado, pero no. Está en la calle”, agrega el profesional gráfico.

Según Jaleos, Camilín “está en un estado de autodestrucción” y que decidió “alejarse de todos los que lo quieren. Ahí está el problema, que no sabe quién va con buenas intenciones. Es un tío noble pese a todo”.

En abril de 2024, madre e hijo protagonizaron un desagradable suceso, en el que tuvo que intervenir la Policía. El suceso tuvo lugar en las inmediaciones de la casa que el cantante tenía en la localidad madrileña de Torrelodones, su bien más preciado y en el que ahora habita su hijo. El espacio Fiesta de Telecinco emitió unas imágenes en las que se veía la desesperación de una madre que ve que su hijo cada día está peor.

Ornelas, como en tantas otras ocasiones, quiso alejar a su vástago de las “malas compañías” que lo visitan en su casa. No era la primera vez que Lourdes Ornelas tenía un enfrentamiento con estos individuos. Hace un tiempo ya vivió un duro encontronazo con ellos en el que resultó herida tras recibir el mordisco de uno de sus perros.