Reacción de la Reina Sofía a las fotos de Leonor y a la querella del Emérito

La Reina Sofía ha reaparecido públicamente al frente de la Casa Real tras una semana especialmente convulsa para la Familia Real. Tal y como les hemos contado en ESdiario, el pasado martes el Rey Juan Carlos anunciaba a través de su abogada que ha iniciado acciones legales contra el ex presidente cántabro Miguel Ángel Revilla para defender su derecho al honor tras las declaraciones "injuriosas y difamatorias" que habría realizado sobre él el ex presidente regional en los últimos tres años.

Como les adelantaba ESdiario, no era el único 'disgusto' para La Zarzuela, puesto que el miércoles la Princesa Leonor se convertía en protagonista de la portada de la revista Diez Minutos por primera vez en bikini durante una relajada jornada en una de las muchas las playas de Uruguay junto a varios compañeros guardamarinas durante la parada que el Buque Escuela de La Armada Juan Sebastián Elcano hizo a principios de marzo en Montevideo.

Dos polémicas tras las que Doña Sofía ha retomado su agenda oficial, como recoge Europa Press, con una contundente reacción: con su mejor sonrisa, presidiendo en Madrid la presentación de la campaña de la Fundación Reina Sofía Cerebros extraordinarios, que tiene como objetivo fomentar la investigación enfermedades neurodegenerativas y la donación de cerebros, necesarios para que avance la detección y prevención de enfermedades como el Alzheimer, el Parkinson y la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).

Una reaparición en la que la Reina Emérita no ha hecho mención alguna a la demanda de su marido a Revilla, ni se ha pronunciado acerca de las fotografías de su nieta Leonor en traje de baño, pero en la una vez más nos ha dado una lección de elegancia en clave sobria con un traje sastre de cuadro príncipe de Gales y una camisa en el mismo estampado con detalle de flores negras en cuello y pecho. Como complementos, fiel a su espíritu bohemio, ha lucido numerosos collares de abalorios, completando su look con unos botines negros de tacón sensato y bolso al tono de Loewe que le hemos visto en numerosas ocasiones y con los que una vez más ha presumido de su austeridad.

Minutos antes, era el Rey Felipe VI el que, al margen de las acciones de su padre contra Revilla, y los rumores de que estaría enfadado y disgustado por las imágenes de la Princesa de Asturias en bikini en esa ya conocida playa de Uruguay, inauguraba su agenda de la semana presidiendo la entrega de la V edición del Premio Nacional de Estadística. Un acto en el que se ha mostrado especialmente relajado y sonriente a pesar de las polémicas que han sacudido a la Casa Real en los últimos días, concluye la crónica de agencia.