Lo que carcome a Kiko Matamoros y dice que se llevará a la tumba

Lleva tres años sin ver a su nieta Adara. Apenas la conoce, la ha visto cuanto tenía meses de vida y nunca más se supo de Kiko Matamoros. La guerra que tiene abierta con su hijo Diego se extiende hasta el punto de no tener contacto con la niña.

Diego Matamoros asegura que su padre no ve a su nieta desde el día que nació: “Me parece un error perderse a una nieta. Siempre ha tenido esa oportunidad para poder disfrutarla y no lo ha hecho nunca. Eso le va a pasar factura”. Y ya le está pasando.

El polémico colaborador siente un resquemor que le cuesta expresar pero ya ha ido dando alguna pincelada, el orgullo le impide dar un paso a la reconciliación y ha hecho estas dramáticas declaraciones: "sé que me llevaré esto a la tumba". Y añadía en su programa diario de Telecinco: “Yo no voy a entrar en debates de ese tipo con mis hijos, ya lo dije hace mucho tiempo. No tengo ganas de hablar de esto” comentaba a sus compañeros de Sálvame.

Kiko Matamoros no conoce a su nieta de cuatro años y no se habla con su hijo Diego a pesar de que le ha pedido "por lo menos que me vea y me salude"

Por su parte, Diego confiesa que no le importaría llegar a un “entendimiento” con su padre para suavizar la tensión y disfrutar de momentos familiares que se está perdiendo: “Por lo menos que te vea y te salude". Eso sí, reconoce que ambos son "muy cabezones”. 

“Prefiero oírle en este tono pero que no es un tema que vayamos a resolver, ni creo que sea fácil. Hay un proverbio judío y es que con determinadas acciones se puede ir muy lejos pero luego es muy difícil regresar”, dice Kiko, que da un pasito diciendo que "le parece bien que ambos se vean y se saluden". No está mal, se empieza por un saludo y luego viene un abrazo, ¿o no?