Morante de la Puebla conquista Las Ventas: quién es el maestro que logró su primera Puerta Grande

Es un torero de estilo clásico, inspirado en figuras legendarias como Belmonte o Joselito El Gallo, lo que le ha otorgado un lugar especial entre los aficionados más exigentes.

José Antonio Morante Camacho, conocido artísticamente como Morante de la Puebla, es uno de los toreros más admirados de la tauromaquia actual. 

Su estilo clásico, inspirado en el arte antiguo del toreo, le ha valido un lugar de respeto entre críticos y aficionados. En junio de 2025, tras más de 25 años de carrera, Morante ha conquistado por fin la Puerta Grande de Las Ventas.

¿Por qué está de actualidad?

El 8 de junio de 2025, Morante de la Puebla fue uno de los grandes protagonistas de la Feria de San Isidro al cortar dos orejas a un toro de Domingo Hernández, tras una faena que fue calificada como “pura poesía torera”. 

Acompañado por Talavante y Marco Pérez en el cartel, fue el único en abrir la Puerta Grande de Las Ventas en esa tarde histórica, logrando una meta que se le había resistido durante años ( Cultoro).

Morante de la Puebla: un artista del toreo que ha marcado estilo durante tres décadas

Morante nació el 2 de octubre de 1979 en La Puebla del Río (Sevilla). Es hijo de José Antonio y Mercedes Camacho. Desde niño mostró pasión por los toros, frecuentando capeas y aprendiendo de manera autodidacta. Su carácter temperamental y su sensibilidad artística marcaron su personalidad desde joven (Historia del Torero).

Trayectoria profesional del torero Morante de la Puebla

1994–2004

Debutó con picadores el 16 de abril de 1994 en Guillena, Sevilla. Tomó la alternativa el 29 de junio de 1997 en Burgos, de manos de Joselito y con Ortega Cano como testigo. 

La confirmación en Las Ventas, el 14 de mayo de 1998, fue su entrada definitiva en la primera línea del toreo nacional. Desde sus inicios, Morante mostró una inclinación clara por el toreo artístico, con referencias constantes a figuras del pasado como Juan Belmonte o Rafael El Gallo. 

Esta primera etapa fue clave para definir su estilo personal, que rápidamente le ganó seguidores y también detractores por su carácter introspectivo y poco dado al espectáculo fácil (TauroArte).

2005–2015

Durante esta década, Morante vivió momentos de máxima intensidad. Se retiró de los ruedos en 2004 por cuestiones anímicas, decepcionado con la dirección del toreo contemporáneo. 

Volvió en 2007 más comprometido con su estilo y su libertad como artista. En plazas como la Real Maestranza de Sevilla y Las Ventas de Madrid dejó faenas memorables, donde la estética y el sentimiento fueron protagonistas. 

En 2012 volvió a anunciar su retirada, alegando motivos personales, pero su regreso en 2014 fue recibido con entusiasmo por el público. 

Su discurso siempre fue claro: prefería cortar una sola oreja haciendo arte, que llenar estadísticas sin emoción. Esta actitud consolidó su imagen como torero de culto.

2016–2025

En su etapa más reciente, Morante ha recogido frutos y reconocimientos. En 2021 recibió el Premio Nacional de Tauromaquia por su trayectoria y su defensa del toreo como expresión cultural. (lamoncloa.gob.es). 

En 2023 logró cortar un rabo en la Maestranza, hazaña que no se conseguía desde 1971. Además, se mantuvo como cabeza de cartel en ferias de primer nivel. 

El 8 de junio de 2025, logró su primera Puerta Grande en Las Ventas durante la corrida de la Beneficencia, coronando así una carrera dedicada a la búsqueda de la belleza en el ruedo.

Vida privada de Morante de la Puebla

Morante contrajo matrimonio con Cynthia Antúnez en el año 2000, con quien tuvo a su primer hijo, José Antonio, nacido en 2002. 

Posteriormente mantuvo una relación con Elisabeth Garrido, madre de sus dos hijas: Lola, nacida en 2009, y María, nacida en 2011. A pesar de su fama, mantiene un perfil bajo en su vida personal. En entrevistas ha declarado su pasión por el flamenco, la pintura y los caballos. Reside en una finca en La Puebla del Río (Europa Press).

Curiosidades de Morante de la Puebla

Brindó un toro a Santiago Abascal.

Apasionado por el flamenco y la pintura: 

Lee filosofía y literatura, conserva arte taurino en su finca y comparte su afición artística en entrevistas y redes

En conclusión, Morante de la Puebla ha recorrido un camino largo y lleno de altibajos, pero siempre fiel a su concepción del toreo como arte. 

Su reciente triunfo en Las Ventas es el broche de oro a una carrera marcada por la pasión, la autenticidad y la valentía. El maestro sevillano entra definitivamente en el olimpo del toreo clásico, no solo por su técnica, sino por su alma torera.Si te ha gustado el artículo compártelo en tus redes sociales y déjanos un comentario con tu opinión.