| 09 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Bélgica vuelve a decepcionar e Italia será la rival de España en semifinales

Gran partido de los de Roberto Mancini que superaron 2-1 a unos belgas de los que se sigue esperando mucho más.

| Julen Izquierdo Deportes

Ya tenemos la primera semifinal de la Eurocopa. España se medirá a Italia después de que la selección de Roberto Mancini haya superado a Bélgica haciendo un gran partido. 

La primera parte nos regaló un partido abiertísimo. Ni Bélgica ni Italia era capaz de controlar el partido en los primeros 20 minutos. Los de Roberto Martínez llegaban con algo más de peligro, quitando el gol que anuló el VAR a Bonucci por fuera de juego. En el minuto 21, Donnarumma se vistió de héroe haciéndole un paradón a De Bruyne y hacía lo propio, aunque con un lanzamiento más cómodo, con Lukaku en el 25’.

Cinco minutos después apareció Barella dentro del área, que se revolvió y cruzó la bola para marcar un auténtico golazo. Imposible para Courtois. A partir de ahí, fue un monólogo de Italia. Bélgica no era capaz de reponerse del tanto de los de Roberto Mancini y en el 40 a punto estuvo de ampliar el marcador Chiesa, con un tiro que se marchó trozando el palo.

Apenas tres minutos más tarde, sí que ampliaría la ventaja Insigne con otro de los goles de la Eurocopa. Recorte y lanzamiento al segundo palo para que Courtois, aunque se esmeró, volviese a sentir impotencia por no poder hacer nada para evitar el tanto. Italia era merecedora de ir ganando el partido. Sin embargo, -cómo es el fútbol- no pasaron ni 30 segundos y el colegiado señalaba un penalti muy, muy dudoso a favor de Bélgica. Lukaku recortaba distancias y concluía una primera parte interesantísima.

La segunda mitad empezó como acabaron los primeros 45 minutos, con Italia dominando. A excepción, de varias galopadas de Doku, que fue el mejor de los belgas, los de Roberto Martínez no dieron signos de poder empatar el partido. Precisamente, Doku comenzó la jugada más clara de la segunda parte. La puso en largo para De Bruyne, que centró a Lukaku y Spinazzola salvó el 2-2. Un Spinazzola que poco después abandonó el campo llorando y en camilla. 

Una nueva Italia, que quiere el balón y juega a un nivel altísimo, será la nueva piedra en el camino de España hacia la final de la Eurocopa. Y Bélgica va camino de convertirse en lo que pudo ser, pero nunca fue.