El ácido salicílico se deriva de la corteza del sauce y es un compuesto orgánico con propiedades beneficiosas para la piel. En ESdiario te contamos cómo actúa y sus beneficios.
El ácido salicílico actúa como un exfoliante químico que penetra en los poros, disolviendo las células muertas y la grasa, y tiene propiedades antiinflamatorias.
El ácido salicílico es un compuesto con propiedades excepcionales que no solo combate las bacterias, sino que también reduce la inflamación y exfolia la piel. Este artículo se adentrará en el ácido salicílico, explorando su origen, dónde se encuentra y cómo beneficia la piel.
El ácido salicílico, también conocido como acidum salicylicum o ácido o -hidroxibenzoico, deriva su nombre del latín "salix", que significa salsa, del cual se obtiene por primera vez. Clasificado como un hidroxiácido aromático, posee un grupo carboxilo (COOH) y un grupo hidroxilo (OH), con la fórmula química C7H6O3.
Se debe el descubrimiento de este compuesto al químico italiano Raffaele Piria, quien lo investigó en la década de 1850, y al químico alemán Hermann Kolbe, que aisló el acidum salicílicum.
El ácido salicílico se encuentra en la naturaleza en diversas plantas como en la corteza del sauce blanco.
Actúa como un agente de defensa contra patógenos y plagas. También se utiliza para estimular el crecimiento y mejorar la fotosíntesis de las plantas.
Encontramos salicilatos, es decir, sales y ésteres del ácido salicílico, en alimentos como verduras, frutos secos, frutas y verduras encurtidas, mostazas, vinos, zumos de frutas, hierbas y especias. Además, se puede producir en laboratorio mediante la reacción de Kolbe-Schmitt, utilizando fenóxido de sodio y dióxido de carbono.
La concentración del ácido salicílico es un factor esencial a considerar. En altas concentraciones, puede irritar las mucosas e incluso provocar
quemaduras en la piel.
Su uso en cosméticos y medicamentos está regulado, y las concentraciones adecuadas varían según su función en un producto específico. Por ejemplo, en cosméticos, la concentración máxima permitida de ácido salicílico como conservante es del 0,5%. Sin embargo, se prohíbe su uso en cosméticos para niños menores de 3 años (excepto champús).
En productos aclarables, la concentración de ácido salicílico no debe exceder el 2-3%, dependiendo del tipo de producto y su uso previsto. En medicamentos preparados y compuestos, las soluciones de ácido salicílico pueden oscilar entre el 1% y el 10%.
Para tratamientos profesionales, existen preparaciones cosméticas altamente concentradas que contienen entre un 30 y un 40% de ácido salicílico y son ampliamente utilizadas en salones de belleza.
El ácido salicílico es conocido por sus diversas acciones en la piel, lo que lo convierte en un compuesto versátil para el cuidado cutáneo.
El ácido salicílico se utiliza en una amplia variedad de productos de cuidado de la piel, incluyendo:
En la industria cosmética y farmacéutica, los fabricantes continúan encontrando nuevas aplicaciones para el ácido salicílico, como emplastos para callos, pastas de zinc anti acné con ácido salicílico y sérums faciales exfoliantes. Además, se encuentran disponibles productos avanzados con una alta concentración de salicilatos, que se utilizan principalmente en tratamientos locales profesionales para el rostro y el cuerpo.
El ácido salicílico demuestra su eficacia en una amplia gama de problemas de la piel, incluyendo:
El ácido salicílico se encuentra en una variedad de formulaciones, según la afección de la piel que se esté tratando y cómo deben usarse. Puedes encontrar ácido salicílico en
La dosis en productos de venta libre generalmente oscila entre el 0,5% y el 2%, siendo el 2% la concentración estándar. Algunos productos, como los destinados a las verrugas, pueden contener concentraciones más altas, aunque no deben utilizarse en la cara.
Es fundamental seguir las indicaciones específicas para cada producto que contenga ácido salicílico y aplicarlo en el área afectada, no solo en los puntos negros o granos activos. Además, es crucial el uso de protector solar si no se incluye en el producto.
En conclusión, el ácido salicílico es un aliado en el cuidado de la piel, con propiedades que abordan una amplia gama de problemas, desde el acné hasta las verrugas y el melasma.
Su acción como exfoliante químico, agente antibacteriano y antiinflamatorio lo convierte en una opción versátil para quienes buscan mejorar la salud y la apariencia de su piel. Sin embargo, es esencial seguir las pautas de concentración y aplicación para garantizar resultados efectivo.
El ácido salicílico ha demostrado ser un recurso valioso en la búsqueda de una piel más saludable y radiante. Si te ha gustado el artículo compártelo en tus redes sociales y déjanos un comentario con tu opinión.