Bildu ridiculiza al PSOE: sin ellos, no hay gobierno de Navarra… ni de España

En pleno debate sobre los pactos de PP con Vox, otros pactos amenazan con dejar en evidencia al PSOE de Pedro Sánchez. Uno de los más conflictivas es el del Gobierno de Navarra, donde la socialista María Chivite necesita al menos la abstención de Bildu para poder ser reelegida presidenta de la Comunidad Foral.

Los independentistas vascos son conscientes de que tienen la sartén por el mango y por tanto van a aprovechar la ocasión para cobrarse el peaje al PSOE, sobre todo después del malestar que hay en las filas de Bildu tras perder alcaldías como la de Vitoria o Pamplona precisamente por acuerdos del PSOE con PNV y UPN -con el voto del PP- para evitar que gobernaran los abertzales.

La número uno de Bildu al Congreso por Navarra, Bel Pozueta, ha lanzado el dardo al PSOE de que su formación política "va a ser indispensable para formar un Gobierno progresista tanto para Navarra como para el Ejecutivo nacional”. Es decir, que Bildu ya apunta más alto y recuerda a Pedro Sánchez que los va a necesitar si quiere continuar en Moncloa.

Y mientras, María Chivite, consciente de que un acuerdo con Bildu -ya sea indirecto o directo- puede dar argumentos a la derecha, ralentiza al máximo las negociaciones para formar gobierno en Navarra señalando que “no se dan en este momento las condiciones para hacer una investidura” ya que está  negociando un acuerdo de gobierno entre PSN, Geroa Bai y Contigo Navarra -la marca navarra de Podemos-.

El acuerdo de los socialistas navarros con nacionalistas provascos y podemitas se da por hecho, ya que es la fórmula de gobierno que ya impera en Navarra, pero el gran dilema son los votos de Bildu, al menos su abstención, y qué dará el PSOE a cambio. María Chivite insiste en que no quiere saber nada de Bildu, pero la aritmética es la que es y necesita su abstención, como ya negoció en el pasado o en los presupuestos de Navarra.