| 26 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Momento en que los responsables de la AVT se encaran con Sánchez.
Momento en que los responsables de la AVT se encaran con Sánchez.

Sánchez patrimonializa el final de ETA para enfado de víctimas y expresidentes

Moncloa ha querido rebajar el malestar creado por sus apaños con Bildu, el acercamiento de presos y la cesión de cárceles al PNV con un "acto blanqueo". El tiro le ha salido por la culata.

| Javier Ruiz de Vergara España

El acto organizado por Moncloa para escenificar la "derrota" de ETA y de paso lavar la imagen del Gobierno de coalición ha acabado volviéndose contra Pedro Sánchez, que tuvo que escuchar cara a cara los reproches de las víctimas del terrorismo.

Ya el evento en sí estuvo marcado por la polémica. Por la ausencia, tras declinar la invitación, de los cuatro expresidentes que combatieron el terrorismo, Felipe González, José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, que no asistieron a la ceremonia. Tampoco el líder de la oposición, Pablo Casado; ni el lendakari, Íñigo Urkullu.

De forma que ha sido el único líder del Ejecutivo que no ha conocido el terror de la banda criminal ni asistido a funeral alguno el que se ha hecho la fotografía final de la victoria. Una foto que evitaron también dos de las principales asociaciones de víctimas, Covite y Dignidad y Justicia.

Pero tampoco salió como Sánchez tenía previsto porque varias significadas víctimas de la banda y la propia presidenta de la AVT hablaron con claridad para desmontar la "hipocresía" del presidente.

Hipocresía que denuncian por el hecho de que sea el partido heredero de Batasuna, Bildu, el que se haya convertido en el nuevo socio preferente del PSOE y pieza clave en la "dirección de Estado", parafraseando a Pablo Iglesias. Como se pudo demostrar recientemente con el voto favorable de los de Arnaldo Otegi al decreto de los fondos europeos.

Teresa Jiménez Becerril: "No voy a ser comparsa de esta hipocresía"

 

Al término del discurso de Sánchez, Maite Araluce y su directivo Miguel Ángel Folguera se dirigieron directamente a él y al ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, para afearles que han solicitado una reunión en la que quieren trasladar su malestar por los acercamientos de etarras sin obtener más respuesta que el portazo.

"Presidente, mira esas armas que son las que han empuñado los que cada viernes acercas a sus casas sin colaborar con la Justicia", le espetaron los representantes de la AVT a Sánchez, según explicaron fuentes de la asociación y se puede ver la imagen que ilustra esta información.

Sánchez, durante su discurso con las armas y la apisonadora de fondo.

 

Además, alto y claro y en representación del sentir de buena parte del colectivo de víctimas, la diputada del PP Teresa Jiménez Becerril, hermana y cuñada de Alberto y Ascen, asesinados por la banda terrorista, censuró también que Sánchez escenificara en su acto en Valdemoro la derrota de la organización terrorista mientras acerca "cada semana" presos al País Vasco y Navarra y pacta el traspaso de las prisiones con el PNV y Bildu "para acelerar la salida de los asesinos de ETA a la calle". "No voy a ser comparsa de esta hipocresía", se plantó.

Cabe recordar que la pasada semana el propio Marlaska viajó a Vitoria para ultimar la transferencia de la gestión de las cárceles con el número dos del Gobierno vasco, Josu Erkoreka. Y que este mismo miércoles la consejera de Gobernanza Pública y Autogobierno, Olatz Garamendi, apuntaló el acuerdo en una reunión con el ministro de Política Territorial, Miquel Iceta.

Sánchez presidió el polémico acto simbólico por la mañana en el colegio de Guardias Jóvenes Duque de Ahumada de la Guardia Civil en Valdemoro, en el que una apisonadora destruyó más de 1.300 armas pertenecientes a organizaciones terroristas, entre ellas las usadas por una decena de comandos de ETA desarticulados entre 1978 y 2002.

 

La diputada del PP, Teresa Jiménez Becerril, hermana y cuñada de dos asesinados por ETA.

 

Sin embargo, Jiménez Becerril se negó a aplaudir a un Sánchez que después "acercará a más presos, como lo hace cada semana, y pasado pactará la competencia de las cárceles con el PNV y Bildu para acelerar la salida de los asesinos a la calle". "Sánchez hoy quería llevarse su foto a nivel nacional e internacional y nosotros de comparsa. Que no cuente conmigo".

Dicho esto, la diputada popular trasladó su apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, "claves" en la lucha contra ETA, por su "sacrificio" en la defensa de la libertad, el Estado de Derecho y la unidad de España, y su agradecimiento a la sociedad española en estos años.

Un sacrificio que quedó eclipsado en un acto organizado a mayor gloria de Sánchez cuya organización Moncloa atribuye a una petición de las propias víctimas. Que, o bien le leyeron la cartilla, o directamente, le dieron la espalda.