Belarra y Montero convierten el 8M en una emboscada contra el "guerrero" Sánchez

En el no va más de la ruleta en la que se ha convertido en Consejo de Ministros llega un nuevo 8-M para escenificar la bronca inacabable entre los dos socios del Gobierno.

Si el primer Día de la Mujer del Ejecutivo progresista en 2020 estuvo marcado por la enorme irresponsabilidad de socialistas y morados con el Covid campando a sus anchas, este último va a estar marcado este martes por el órdago que Ione Belarra e Irene Montero pretenden lanzar a Pedro Sánchez y, de paso, a la propia Yolanda Díaz.

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Belarra ya calentó este domingo la cita y demostró lo que la cúpula de su partido pretende hacer este 8-M: convertir la reivindicación feminista en una algarada callejera contra el inquilino de La Moncloa enarbolando de nuevo el No a la guerra por el envío de armas a Ucrania.  Una estrategia que en palabras de la propia Belarra ha convertido al PSOE en el “partido de la guerra”.

Y es que, en realidad, este 8-M va a suponer una nueva muestra de hasta qué punto Irene Montero ha dividido al feminismo, ignorando a su sector más tradicional vinculado al PSOE histórico y fomentando leyes que han provocado la revuelta del sector socialista del Gobierno, que en su día encabezó Carmen Calvo para plantar cara a los experimentos de la ministra de Igualdad. Y de paso enmarañando la convocatoria del Día de la Mujer con el conflicto en Europa provocado por la agresión de Rusia.

El PSOE relanza su campaña feminista al margen de Podemos apuntalando el cisma en el Gobierno.

De esta manera, el movimiento feminista saldrá a la calle en dos manifestaciones distintas, con distintas pancartas y lemas opuestos. Y a su vez, la Izquierda Unida de Alberto Garzón y Yolanda Díaz reivindicará el 8-M puesta en evidencia por la propia cúpula de Podemos. Como ha evidenciado el recado del exlíder de IU, Gaspar Llamazares, a Belarra en estas últimas horas:

Acusar entre otros a tu socio en el gobierno de ser el partido de la guerra, y sin embargo seguir formando parte de él no tiene un pase. Entre la disparate y la hipocresía.

— Gaspar Llamazares (@GLlamazares) March 6, 2022

A este guirigay se suma el bloqueo por parte de Moncloa de las principales leyes feministas que Irene Montero pretende imponer desde el Ministerio de Igualdad y sin consenso previo con el PSOE.

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Y son tres de enorme calado político y propagandístico para Podemos: la ley de Garantía de la Libertad Sexual, la popularmente conocida como la del sí es sí; la ley de Trata que pretende prohibir la prostitucion -con gran debate interno en el PSOE- y la ley del Aborto.

Si nada de tuerce, la primera debería llegar al BOE en abril, previo paso por el Senado. Si no hay represalia socialista ante la encerrona que Belarra y Montero le han preparado este 8-M a Sánchez y su “partido de la guerra”.

PP y Cs, en la marcha oficial

Mientras, la marcha oficial del 8-M contará con la presencia de sendas delegaciones de PP y Cs. La coordinadora general, Cuca Gamarra, ha confirmado que el partido participará en las manifestaciones que se celebren en toda España, al tiempo que promoverá su propia declaración cuya idea fuerza será la de "mujeres libres".

"Mañana es 8 de marzo y las mujeres del PP, que decidimos en cada momento y de manera individual lo que consideramos, celebraremos este día", ha declarado Gamarra en una rueda de prensa junto al eurodiputado y presidente del comité organizador del XX congreso extraordinario, Esteban González Pons.

También Ciudadanos estará en la manifestación, según ha anunciado su vicesecretario general, Edmundo Bal, que ha cargado contra la ministra de Igualdad, Irene Montero, por pretender apartar al partido naranja de la marcha feminista, "como en el Día del Orgullo".

"Las mujeres se han librado de la tutela de los hombres y no lo han hecho para caer en la tutela de una ministra de Igualdad", ha señalado Bal este lunes en una rueda de prensa, para confirmar la presencia de Ciudadanos, como "siempre", en la marcha oficial.