Iker Jiménez sale del plató y revive la historia fantasmal del "pueblo maldito"

Iker Jiménez ha decidido cambiar el plató de Cuarto Milenio para comenzar su programa en un lugar siniestro. Se ha trasladado a una carretera de Vitoria, en el condado de Treviño, en la que cuenta que se han producido apariciones y fenómenos extraños desde hace años y que le han sido relatadas por un testigo.

"Puede que esta sea la más extraña que yo haya podido registrar, tanto que merece la pena venir hasta aquí para ponerme en la piel del testigo, para subirme en su moto y sentir lo que él vivió hace tan solo unos días", ha explicado.

Iker Jiménez relata el momento espeluznante en el que le encañonaron con un arma

Por ello, el presentador se ha subido en una moto para revivir la experiencia y avanzar lo que le ocurrió al testigo: "Era una figura muy alta, muy muy alta, mi primera reacción fue frenar la moto, me quedé mirando pendiente de la carretera pero sin creer lo que veía, tuve mucho tiempo para verla, había mucho viento pero no se movía, ni por arriba ni por abajo, tenía mucho pelo negro pero la cara no se le tapaba, se le veían perfectamente las sombras de los ojos, la nariz y la boca, era muy delgada, me seguía con la mirada, cuando pasé por su lado todos los ruidos cesaron y con una voz muy suave me susurró ‘hoy no vas a llegar a casa”.

El experto en fenómenos extraños, Enrique Echazarra, reconstruye el recorrido y sitúa el punto exacto donde este testigo tuvo la espeluznante aparición: “Estamos muy cerca del despoblado Ochate”. Además, ha explicado que lo que más le llamo la atención "es el miedo que tenía a volver a pasar por ahí. Tiene mal cuerpo cuando vuelve. Se nota que ha vivido algo allí que le ha impresionado".

Jiménez presiente que algo ocurre: "Pusimos rumbo todo el equipo al pueblo maldito, nos adentramos una vez más en esta tierra callada con el máximo respeto, pero con el latido especial de que lo misterioso nos rondaba".

"Llegar a Ochate, con el impacto de un testimonio aterrorizado, le daba a todo un tono diferente y único", decía Jiménez, que junto a Enrique Echazarra y Javier Pérez Campos, debatieron en la mesa el misterio sobre lo ocurrido en aquel punto de esa carretera que "siempre ha tenido fama de peligrosa", advertían. Sin embargo, no encontraron el origen de su misterio. Eso sí, Jiménez asegura que seguirá investigando.