Trump castiga a Sánchez: cambia la ruta marítima de EEUU de Algeciras a Tánger
La exclusión del puerto gaditano de una ruta estratégica entre Asia y Estados Unidos, impulsada tras la negativa del Gobierno español a admitir barcos sospechosos de trasladar armamento a Israel, amenaza miles de empleos
El buque Luna Maersk lleno de contenedores en Algeciras
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ordenado un cambio estratégico en la ruta marítima que afecta directamente al puerto de Algeciras. La histórica conexión que unía Asia con la costa este de EE.UU. a través del enclave gaditano será redirigida al puerto marroquí de Tánger Med. Esta medida llega en un contexto de creciente tensión entre Washington y Madrid, que ha cobrado especial fuerza tras la negativa del Gobierno español a permitir el atraque de dos buques sospechosos de transportar armamento estadounidense con destino a Israel.
Dicha negativa, impulsada por la presión de los socios de coalición Sumar e Izquierda Unida, ha sido interpretada en Washington como un gesto político contrario a sus intereses estratégicos. Este veto ha deteriorado la confianza bilateral y ha motivado la exclusión de Algeciras de una ruta marítima vital para el comercio internacional.
Pero la polémica no acaba ahí. La desconfianza estadounidense hacia la seguridad de las infraestructuras españolas también se ha visto exacerbada por el acuerdo del Gobierno de Sánchez con la multinacional china Huawei. Estados Unidos mantiene reservas sobre los sistemas de seguridad chinos, acusados de potencial espionaje, lo que ha complicado aún más las relaciones y ha influido en la decisión de desvincular a Algeciras de la ruta.
El puerto de Algeciras, que movió más de 110 millones de toneladas de mercancías el pasado año, se enfrenta ahora a una dura competencia con Tánger Med, que se beneficia directamente de esta redirección de tráfico. Las navieras internacionales, incluida la gigante Maersk, han empezado a priorizar el puerto marroquí para sus rutas desde Asia hacia Estados Unidos, dejando al puerto español en una posición vulnerable.
Tremendo impacto económico
Las consecuencias económicas para la comarca del Campo de Gibraltar son alarmantes. Miles de trabajadores portuarios, estibadores y empresas auxiliares ven peligrar sus puestos de trabajo ante la disminución de actividad y la pérdida de contratos estratégicos. El sector advierte que la recuperación de estas rutas puede ser complicada y requerirá un esfuerzo institucional considerable.
Desde la Autoridad Portuaria de Algeciras, el presidente Gerardo Landaluce ha solicitado prudencia y ha asegurado que el puerto mantiene otras conexiones con EE.UU. mediante diferentes servicios. Sin embargo, los expertos reconocen que la pérdida de esta ruta supone un revés significativo para el enclave.