Los turbios negocios de Iván Redondo con Moncloa: 30.000 euros por conseguir contratos para una empresa de armas de EEUU

“Un éxito de Iván Redondo, logra conseguir el favor del Gobierno para un contrato para Santa Bárbara”, así presumía el consultor político en su nueva faceta como intermediario de empresas armamentísticas para conseguir contratos del Gobierno de Pedro Sánchez. El problema es que Redondo no es un intermediario cualquiera, es el ex jefe de gabinete de Pedro Sánchez y era su mano derecha cuando accedió a Moncloa, y está usando descaradamente esa conexión con el Gobierno y el PSOE para dar contratos de armas a empresas de EEUU a cambio de jugosas comisiones de 30.000 euros. Un caso claro de influencias en contratos millonarios que se pagan con nuestros impuestos para que Redondo se forre a su coste.

En concreto, el Consejo de Ministros aprobó el pasado 8 de octubre la adjudicación directa a la empresa armamentística americana Santa Bárbara Sistemas del programa de actualización de los vehículos de combate Pizarro del Ejército de Tierra. Este contrato se lo da el Gobierno de Pedro Sánchez a esta empresa en concreto por encima de otras por la intermediación del que fuera ex jefe de gabinete de Sánchez, que cobra de esta empresa por ello. Un obsceno uso de las influencias a cambio de una comisión de 30.000 euros para Iván Redondo.

El propio Iván Redondo presumía de la operación en el sector de la Defensa difundiendo en la prensa especializada que, como asesor de la filial europea de General Dynamics y ex director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, “ha sido una figura clave para lograr esta adjudicación directa que contribuirá a reforzar el papel de Santa Bárbara”. Pero como hemos señalado, el favor del ex jefe de Gabinete de Sánchez no es por amor al arte, es para embolsarse una comisión de 30.000 euros de la empresa americana de armas.

Los programas del Gobierno de los que Santa Barbara se lleva un contrato tras pagar a Iván Redondo por su influencia en Moncloa están dotados con una financiación extraordinaria de más de 10.000 millones de euros, para que nos hagamos una idea de la gran cantidad de dinero público que hay en juego. Y del obsceno uso de las influencias para que el ex jefe de gabinete de Sánchez se haga de oro a cambio de conseguir contratos por sus relaciones con el PSOE a empresas de armas de EEUU.