En ocasiones veo racistas
Coche de la Guardia Civil en una imagen de archivo
Por increíble que parezca, la izquierda no cesa en sus paranoias, ni siquiera durante la Navidad, un periodo en el que los cristianos buscamos paz, armonía y buenas intenciones con familiares, amigos y con el prójimo en general.
De los creadores de “Yo soy progre y digo Felices Fiestas y no Feliz Navidad”, llega a nuestras pantallas el largometraje titulado: “La Guardia Civil es racista, porque yo lo valgo”. Sí, lo han leído bien. Ya no solo los que algunos denominan como extrema derecha y la derecha extrema son racistas, sino que ahora toca repartir la de L'Oréal a los de la Benemérita, todo por una simple publicación en la que alertan de que, durante el periodo de cabalgatas, a nuestros domicilios podrían acceder unos mangantes en lugar de los Reyes Magos de Oriente.
‘Malhechor’, ‘Mangar’ y ‘Va-Saltar’ -pero no se cayó, sino que lo tiraron- son los nombres de los delincuentes ficticios que aparecen en la imagen (o más bien, aparecían, porque la Guardia Civil, ante las críticas de algunos progres, decidió borrarla de sus redes sociales), los cuales causaron tantos quebraderos de cabeza tanto a los políticos de izquierda como a sus simpatizantes.
Señores lectores de ESdiario, ¿cuál creen ustedes que puede ser el motivo? La respuesta es sencilla: porque nuestros amigos amantes del populismo, en ocasiones -casi siempre- ven racismo donde no lo hay, de la misma manera que el niño del Sexto Sentido veía muertos a la primera de cambio. De hecho, consideraron que los tres Reyes Magos de la publicación de la Benemérita eran de raza negra, en lugar de observar detenidamente la pantalla y darse cuenta de que no se trataba de personas racializadas, sino de individuos cubiertos con un pasamontañas.
Increíble pero cierto. Lamentablemente, los zurdos populistas, además de ser populistas al cubo y defensores de las causas de la marihuana y de los cuentos de Peter Pan, también son miopes. Me da la sensación de que, para finales de este nuevo año que hemos comenzado, van a tener que pedirle a Papá Noel o al Olentzero que les traigan, aparte del carbón que merecen por defender sus políticas de extrema izquierda, unas gafas de la marca Dolce & Gabbana. Como, en el fondo, a ellos también les va el lujo, aunque vayan de defensores de la clase obrera…
"Van a tu casa pero… no con regalos". Los tres hombres montados en un camello que ofendieron a políticos de izquierda y extrema izquierda lograron que toda una institución como la Guardia Civil borrase su tuit navideño por excelencia, pensado para los españoles. Si el Duque de Ahumada levantara la cabeza, le daría un chungo por la actitud de sus pupilos ante semejante despropósito. De hecho, nunca entenderé cómo, con los bemoles que poseen los agentes de la Buena Merindad a la hora de enfrentarse a situaciones límite o a delincuentes extremadamente violentos, acaben acobardándose hasta borrar una publicación por el qué dirán cuatro o cinco ofendiditos amantes de la Ley del Embudo. Tirón de orejas para ellos, exclusivamente por acobardarse ante los defensores de la desigualdad.
En definitiva, y para concluir, tan solo me queda mandarles un par de mensajes en homenaje a estas fechas navideñas que estamos a punto de dejar atrás: señores de la Guardia Civil, y señores, señoras y ‘señoros’ de la izquierda y extrema izquierda, existe vida más allá de la palabra 'racista'. Para todos los demás, en especial para los españoles de bien y los lectores de ESdiario: ¡Feliz año 2025!