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Catalá y Ribó sí se verán las caras y no imitará el plantón de Puig a Mazón
La próxima alcaldesa se reunirá el lunes con el todavía alcalde para realizar “un traspaso de poderes amable” y defiende un gobierno en solitario con apoyos puntuales
El todavía alcalde de Valencia, Joan Ribó, no se marcará un Ximo Puig -que plantó a Carlos Mazón en la reunión que el popular le había solicitado- y sí se verá las caras con la próxima alcaldesa, María José Catalá, el lunes 12 de junio -5 días de la investidura, que es el 17- para abordar un “traspaso de poderes amable”.
Catalá y Ribó ya se han visto previamente en la entrega de credenciales de concejal en la Ciudad de la Justicia, donde se han saludado, una imagen tras las elecciones del 28 de mayo que no se ha podido dar entre Mazón y Puig.
María José Catalá -que fue madre hace una semana- ha señalado que cuando tome posesión como alcaldesa el 17 de junio va a ponerse a trabajar desde "el minuto uno" y ha remarcado que quiere gobernar en solitario llegando a acuerdos "puntuales en la legislatura", algo que según ella "se va a realizar con absoluta normalidad".
Así que, en principio, el futuro gobierno de Valencia estará únicamente integrado por los 13 concejales del PP. Según la ley electoral, el PP, al ser la lista más votada, puede hacer a María José Catalá alcaldesa sin llegar a ningún pacto previo con Vox o con otra fuerza. Otra cosa es para aprobar presupuestos y otras cuestiones.
El candidato de Vox, Juanma Badenas, no se da por vencido en que Catalá cuente con ellos y ha indicado que "nosotros tenemos la mano tendida para la mejor gobernabilidad y entiendo que para gobernar Valencia de la manera más adecuada hace falta constituir una mayoría en el gobierno del Ayuntamiento que sea lo suficientemente sólida como para poder hacerlo".
