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La desgracia de Arantxa Sánchez Vicario en la agonía de su padre
A pesar de no hablarse con su familia la extenista ha viajado a España para despedirse de Emilio Sánchez, que permanece ingresado en la Quirón y tiene un muy mal pronóstico médico.
Arantxa Sánchez Vicario ha querido despedirse de su padre a pesar de que no se habla con él. La extenista viajó este viernes a Barcelona desde Estados Unidos para visitar a Emilio Sánchez en el hospital Quirón ante el mal pronóstico de los médicos.
Éste padece alzheimer y la enfermedad está ya tan avanzada que no conoce a sus seres queridos. Lleva tiempo ingresado, pero aunque la exdeportista estuvo en la Ciudad Condal en Navidad no fue a verle.
La triple campeona de Roland Garros no se habla con sus padres, con los que lleva tiempo pleiteando en los juzgados porque según dice se han gastado su fortuna. "Estoy en la ruina y quiero que mi familia me explique por qué tengo tantas deudas. Hacienda y Luxemburgo me reclaman cantidades que no puedo pagar", declaró el año pasado ante el juez.
Tampoco se habla con sus hermanos, sólo con Emilio, el mayor. Pero finalmente ha hecho de tripas corazón ante la gravedad extrema de la situación.
