| 27 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Verónica Forqué volvió a reinar en el Teatro Español.
Verónica Forqué volvió a reinar en el Teatro Español.

Massiel va más allá en una capilla ardiente de Verónica Forqué llena de dolor

ESdiario pudo ver cómo el dolor y la pena se reflejaba en el rostro de los asistentes, el último adiós a la actriz, algunos con lágrimas en los ojos no eran capaces de articular palabra.

| Mabel Redondo Chismógrafo

 

 

La muerte de Verónica Forqué ha conmovido al país. La actriz de la mirada limpia y la dulce sonrisa se quitó la vida el pasado lunes en el baño de su domicilio en Madrid. El cuerpo ya sin vida lo encontró la empleada de la actriz y una vecina del edificio, que inmediatamente llamaron a los servicios sanitarios de emergencia, sin embargo nada se pudo hacer para salvarle la vida.

La trágica muerte de Verónica Forqué ha sido un mazazo para todos, inesperada desde luego, porque a sus 66 años aún le quedaba mucha vida por delante. La escena y el cine español se han quedado huérfanos, porque ha muerto una de las grandes, querida y admirada. Amigos, compañeros de profesión, fans incondicionales y personalidades del mundo de la cultura y de la política se han dado cita en el Teatro Español donde se ha instalado la capilla ardiente para darle el último adiós a Verónica Forqué.

A las once de la mañana se abrían las puertas del madrileño teatro para dar paso a las cientos de personas que han querido rendirle homenaje a la actriz. En el escenario; el féretro de La Forqué con diez coronas de flores alrededor. Entre ellas la del Teatro Español, la de su familia, otra muy especial de parte de Pedro Almodóvar y su hermano Agustín y otra de "la escuela de la consciencia", esta última muy especial también por su vínculo con la espiritualidad, el crecimiento personal y el yoga.

La gran ausente ha sido su única hija María Iborra, la joven está completamente destrozada y no pudo sacar fuerzas para acudir a la capilla ardiente.

Sí veló el cuerpo de su madre en el tanatorio de San Isidro la tarde del pasado martes, allí pudo recibir el pésame de otros familiares y amigos cercanos que se acercaron a mostrar sus condolencias. Muchos de ellos sin poder creer lo que había pasado y conmocionados por la muerte de la actriz.

El público que siempre ha querido y quiere a Verónica Forqué hacía cola alrededor de la Plaza de Santa Ana donde se ubica el Español, e iban pasando ordenadamente para ocupar los más de setecientos asientos con los que cuenta el teatro. El dolor y la pena se reflejaba en cada rostro de los asistentes, era el último adiós a la actriz, algunos hasta con lágrimas en los ojos no eran capaces de articular palabra.

El llanto desconsolado de Beatriz Rico y de Massiel

Beatriz Rico y Massiel han sido dos de las amigas de la actriz que a la salida de la capilla ardiente no han podido contener el llanto. Conmocionadas han descrito a Verónica Forqué como "una mujer única, buena, dulce y una gran artista".

Massiel quiso ir más allá haciendo un llamamiento público para alertar a las autoridades y sanitarios de la importancia que tienen las enfermedades mentales y que se tomen medidas para atajarlas: "A la sanidad pública y al Gobierno, que tengan en cuenta que la depresión es una enfermedad muy fuerte que tiene prioridad. El Covid hace mucho daño por el aislamiento".

La amistad de Massiel y Verónica Forqué viene de lejos, se remonta a 1987 cuando rodaron La vida Alegre a las órdenes de Fernando Colomo, en el reparto, también estaba Ana Obregón. Es esta una fotografía llena de recuerdos y nostalgia para la cantante eurovisiva que repite en sus redes sociales.

 
 
 
Ver esta publicación en Instagram
 
 
 

Una publicación compartida de NachoJfoster /Davenport Palace (@nachojfoster)

Este miércoles se subía el telón en el Teatro Español para despedir a Verónica Forqué, un escenario con mucha carga emocional para la artista, porque allí encarnó hace años a Doña Rosita la Soltera de Federico García Lorca, en una adaptación de Miguel Narros. Después vendrían otras obras, pero fue en 2020 cuando el Teatro Español volvía a cruzarse en su camino, pero esta vez para dirigir: Españolas, Franco ha muerto.

Verónica Forqué o Vero, como la llamaba su entorno más cercano, pasó cincuenta años haciendo lo que más le gustaba, interpretar. Una actriz incansable que conquistaba con su sonrisa y su espontaneidad, y que lo probó todo; teatro, cine y televisión. No pasó de puntillas, ganó cuatro Goyas y fue la primera intérprete femenina en ganar dos Goyas el mismo año. La interpretación fue su pasión, su vida. Su recompensa será que nunca caerá en el olvido porque su inmenso y valorado legado artístico quedará para siempre.