Casillas habría "puesto en peligro" a su familia para "reírse" de los paparazzi

La entrevista que Iker Casillas concedió a Gustavo González hace casi un año y que nunca se emitó sigue dando mucho que hablar ahora que se ha separado de Sara Carbonero. Entonces el portero hablaba de la hipotética ruptura y de las causas de su mudanza a Madrid.

Pero poco a poco siguen saliendo detalles de unos audios en los que tambien habla de su relación complicada con la prensa: "Sinceramente, la profesión de paparazzi en España está por los suelos. Me estás siguiendo, me estás persiguiendo, me estás medio acosando… ¡Déjame en paz! Me quiero meter el dedo en la nariz, me quiero tocar los huevos. ¡No me hagas ninguna foto!".

Es tal la presión que Iker siente por parte de los paparazzi, que habría puesto en juego su vida y la de su familia para que las cámaras no captasen una imagen suya. "El día que nos íbamos a Madrid, íbamos por la carretera y en el momento que había un poco de subida yo les p... y ponía el coche a 150… me pasé más de 100 kilómetros riéndome de ellos", aseguró entre risas Casillas mientras Sálvame reflexionaba con que tal vez estaba poniendo en peligro a su familia para escapar de la prensa.

Mientras tanto, intentando recomponer su día a día tras conocerse la noticia de su separación Carbonero ha decidido centrarse en su faceta de mamá para superar este duro bache sentimental que se suma al complicado momento de salud que vive. Disfrutando al máximo de su trabajo en la radio a cargo de la sección Que siga el baile en Radio Marca, Sara ha encontrado en el estudio el refugio perfecto en el que mostrarse sin tapujos.

"Está todo bien, todo en orden", confesó  con serenidad ante la pregunta de su compañero Vicente Ortega. A pocos minutos de entrevistar al rapero Rayden, uno de sus cantantes favoritos, Sara volvió a demostrar que es una mujer fuerte y que está dispuesta a seguir adelante con su vida.

Cada día más recuperada de su intervención, aseguró que está deseando trabajar: "Si me dejaran más días, más días", confesaba la periodista reclamando poder ir más días a la semana a la radio.