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Arantxa de Benito se sienta en el "trono" para celebrar sus 50 de forma drástica
Para darle la bienvenida al medio siglo con muchas ganas de vivir y vibrar no solo ha tomado medidas drásticas y muy significativas, sino que tenemos todos los detalles de la que se avecina.
Arantxa de Benito cumple 50 años y lo hace con alegría y expulsando literalmente los “malos rollos” para darle la bienvenida al medio siglo, con muchas ganas de vivir y de vibrar.
Así de agusto se ha quedado posando de esta guisa con motivo de su aniversario, una foto muy natural y desenfadada en la que se deja ver sentada en un inodoro y con una sonrisa de oreja a oreja, el texto que la acompaña no puede ser más explícito, ¡aviso a navegantes!: "Adiós a los malos rollos, bienvenidos mis 50 y a partir de ahora a seguir disfrutando de todo lo bueno que me regala la vida".
No es que me guste recurrir a frases hechas o tópicos sin sentido, pero en este caso es inevitable decir que "una imagen vale más que mil palabras", porque Arantxa no ha podido ser más literal con el verbo "expulsar" y si hablamos de malos rollos, mejor todavía.
Cuando Arantxa habla de "malos rollos" es más que probable que se refiera a la polémica que mantuvo recientemente con la pareja de su ex, Romina Belusccio al afirmar ésta que: "Nuestro hogar está donde estemos los tres ", refiriéndose a Guti, a su hijo y a ella. Arantxa sintió que la modelo estaba excluyendo a sus hijos Aitor y Zaira, y ese fue el punto de partida de un cruce de acusaciones que finalmente no llegaron a más.
Ahora Guti, Romina y el pequeño Enzo de seis años se acaban de instalar en Almería, donde el que fuera jugador del Real Madrid ejercerá de entrenador del equipo almeriense.
Si hay quienes cumplen 50 y se vienen abajo por la crisis del medio siglo, en Arantxa cumplir años tiene el efecto contrario.
La empresaria ultima una fiesta de disfraces por todo lo alto en un local de Madrid junto a la castiza Puerta de Alcalá; prepara su disfraz desde hace tiempo y sorprenderá mucho porque la temática es el circo y ella piensa aparecer como una grande del mundillo circense; “descarto el disfraz de payasa”, no porque no le guste sino más bien porque cumplir 50 no es cualquier cosa y quiere aparecer glamurosa y brillar entre los 200 invitados restantes, que para eso es la anfitriona.
Ganas y energía no le faltan, porque ahora, me cuenta, "estoy en una de las etapas más felices de mi vida, tengo salud que es lo fundamental, dos hijos maravillosos a los que quiero y tengo a Jairo, mi novio, con quién soy muy feliz".
Que se preparen todos los invitados, que vayan bien descansados porque el fiestón de Arantxa que dará el pistoletazo de salida a las ocho de la tarde promete alargarse hasta el amanecer.
Mientras me cuenta los detalles de la fiesta, calla de repente, silencia palabras durante unos segundos y de forma espontánea verbaliza su pensamiento: "A mi padre siempre le llevo en mi pensamiento pero en días como hoy que es mi cumpleaños le echo muchísimo de menos, y conforme voy cumpliendo le voy echando más en falta, han pasado nueve años desde que nos dejó pero me acuerdo tanto de él…".
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Ella siempre mantuvo una complicidad muy especial con su padre, Rafael de Benito, era su debilidad, por eso es que en su cumpleaños la colaboradora de Espejo Público ha querido rendirle homenaje también en su Instagram.
Por otro lado, está feliz junto a Jairo, un empresario del sector inmobiliario con quien lleva seis meses de relación y con quien brindará por muchos más: “De Jairo me gustan muchas cosas, es alegre, divertido y sobre todo muy natural, a mi se me conquista con la naturalidad. No vivimos juntos, mantenemos nuestro espacio, hemos encajado de maravilla”.
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El empresario tiene un hijo con el que Arantxa se lleva estupendamente, tienen mucha complicidad, de hecho el joven de 17 años fue el primero en felicitarle con un cariñoso mensaje en el que le agradecía que hubiese aparecido en la vida de su padre y en la suya propia. Un mensaje que a De Benito emocionó profundamente:
"Mira, - me dijo mientras leía el whatsapp- se me pone la piel de gallina, el hijo de mi pareja es un niño riquísimo, yo le hago participe de todos nuestros planes, nos llevamos muy bien, nos entendemos".
