Jesús Mariñas "resucita": esto fue lo que pasó antes y después de su ingreso

El conocido y veterano periodista Jesús Mariñas pudo temer por su vida el pasado jueves por la noche. 22 horas. El gallego se encuentra en una situación complicada. A su lado su marido, Elio Valderrama. El cuadro clínico es preocupante. Al comprobar su marido que es difícil pasar la noche sin atención médica se llama al 112. Teléfono de emergencias sanitarias. En el caso de Jesús Mariñas se agrava la situación al tratarse de un paciente oncológico.

Mariñas actualmente vive en el centro de Madrid. En los aledaños de la Plaza de Callao. Al llegar la ambulancia del 112, el marido de Mariñas aconseja que lo mejor es llevarlo al hospital madrileño Ramón y Cajal donde el paciente tiene todo su historial clínico y será más prontamente diagnosticado a qué se debe su actual situación.

Es en ese momento cuando se le informa a la pareja de Mariñas que no lo pueden trasladar. Sólo atención en casa. Valderrama conoce que ese no puede ser el proceso porque la mejor manera es ingresarlo para que sea tratado de este cuadro médico. Y complicado. Ante la negativa del 112, un taxista reconoce a quien un día fue una de las plumas más punzantes de nuestra prensa de sociedad y colaborador atrevido y guerrillero en el extinto programa Tómbola del desaparecido Canal 9, entre otros muchos magacines de entretenimiento.

Jesús Mariñas pasó horas complicadas pero parece que todo quedó en un susto

El taxista se ofrece a llevarlo al hospital. A medianoche del jueves, Jesús Mariñas queda ingresado. Fueron horas complicadas. Todo indica que se ha quedado en un gran susto, según ha podido comprobar este mismo martes ESdiario.

Este periódico ha podido hablar con Jesús. Dicen que los gatos tienen siete vidas y parece que el periodista también. Mariñas ha hablado conscientemente. Se encuentra mucho mejor. Y con ganas de conversación y de vivir. Su alta hospitalaria dependerá de la evolución de las próximas horas. Jesús quiere volver a casa para continuar con su rutina. Guerrero insaciable y hombre que ha absorbido la vida como le ha dado la gana en cada momento. Esta partida (a la vida) también la ha ganado.