Sánchez tumba el legado de Felipe y abre el melón para revisar la Transición

Más de 40 años de historia del PSOE han quedado este miércoles en cuarentena en el Congreso. Y lo que nunca planteó ni Felipe González ni José Luis Rodríguez Zapatero se abre a hacerlo Pedro Sánchez, para satisfacer la exigencias de sus socios de la coalición Frankenstein: poner patas arriba el acuerdo de la Transición y poner en solfa la Ley de Amnistía.

Unidas Podemos y PSOE han pactado dejar sin efecto parte de esa Ley de Amnistía de 1977 al declarar dentro de la Ley de Memoria Democrática que los crímenes de lesa humanidad, genocidio y tortura que se cometieron durante el franquismo no gocen del amparo de la normativa de amnistía promulgada en 1997. Además, extenderán hasta 1982 las víctimas del franquismo y retirarán hasta 33 títulos nobiliarios de cargos del régimen como Calvo Sotelo o Primo de Rivera. 

Contra el Rey, la Policía Nacional y la Guardia Civil

Concretamente, la redacción consensuada en este punto, mediante una enmienda, recoge que "todas las leyes del Estado español, incluida la Ley 46/1977 de Amnistía, se interpretarán y aplicarán de conformidad con el derecho internacional convencional y consuetudinario y, en particular, con el derecho internacional humanitario, según el cual los crímenes de guerra, de lesa humanidad, genocidio y tortura tienen la consideración de imprescriptibles y no amnistiables".

La vuelta de tuerca a la ley de memoria histérica es otro intento de enfrentar a los españoles, q además implica una ignorancia histórica espeluznante

Extender el franquismo hasta 1982 es deleznable y antidemocrático

¿Se perseguirá los crímenes de ETA, Grapo o FRAP amnistiados?

— Rafael Hernando (@Rafa_Hernando) November 17, 2021

Además, las formaciones han acordado que el Valle de los Caídos vuelva a la denominación original de Cuelgamuros y que las víctimas de la dictadura tengan derecho al resarcimiento de los bienes incautados, así como de las sanciones económicas impuestas por el régimen de Francisco Franco. También se amplía la consideración de víctimas en el periodo de Transición (hasta 1982).

Por otro lado, según han explicado desde Podemos, se suprimen los títulos nobiliarios concedidos a 33 personalidades del régimen, como los ducados de Primo de Rivera, de Franco, Mola, Calvo Sotelo, así como marqueses de Queipo de Llano, Arias Navarro, Alboran, Somosierra o Casa Cervera, entre el listado establecido.

Los dos socios de coalición han pactado además el contenido de una treintena de enmiendas al articulado del proyecto de ley de Memoria Democrática y estipulan que los crímenes de guerra, lesa humanidad, genocidio y torturas no prescriben.

Una modificación que supone un guiño a ERC, dado que los independentistas persiguen desde hace tiempo la derogación de la conocida como Ley de Amnistía al considerar que exoneraba a altos dirigentes de la dictadura franquista.

De esta forma, PSOE y Unidas Podemos estipulan que debe aplicarse el derecho internacional vigente en materia de delitos de lesa humanidad y demandan que el fiscal de Sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática aborde la investigación de los hechos que tuvieron lugar con ocasión del "golpe de estado, la guerra y la dictadura".