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El ministro de Sanidad, Salvador Illa
El ministro de Sanidad, Salvador Illa

El Gobierno rectifica a medias y seguirá sin contabilizar a todos los muertos

El Ejecutivo ha publicado la nueva normativa para el recuento de casos afectados por Covid-19, pero no incluirá los fallecidos sin prueba diagnóstica por lo que la cifra real seguirá oculta.

| A. Jiménez España

La cifra de fallecidos por coronavirus es mucho mayor de la que reflejan los datos ofrecidos por el Gobierno. El director del Centro de Coordinación de Emergencias y Alertas Sanitarias, Fernando Simón lo confirmó este jueves, después de que las comunidades autónomas advirtieran del desfase en el recuento, por lo que el Ejecutivo ha decidido modificar su criterio aunque seguirán sin contabilizarse el número real de fallecidos.

Y es que, Sanidad ha publicado en el BOE una nueva normativa que obliga a las comunidades autónomas, incluidas las ciudades de Ceuta y Melilla, a comunicar los casos fallecidos con infección por el nuevo coronavirus, independientemente del lugar del fallecimiento.

Aún así, de momento en las cifras de este viernes, el número de casos confirmados alcanzaría los 188.068 positivos y el de fallecidos es de 19.478,  al sumarse 585 muertos más, aunque Simón ha señalado que  "durante unos días, tenemos que ir corrigiendo las cifras".

 

Además, Simón ha advertido de que "Sanidad tardará dos o tres días en reordenar la información", para que permitan hacer una "interpretación correcta" sin la distorsión de "artefactos", en referencia a los nuevos datos que se están empezando a incorporar en los últimos días. De hecho,  ha señalado que "tendremos que ir corrigiendo las series históricas", aunque espera que "la variabilidad sea pequeña".

Y es que, la nueva normativa permitirá tener constancia del número de personas que han muerto en residencias de ancianos y en su domicilio, una cifra que hasta ahora quedaba fuera del balance oficial, tal y como pusieron de manifiesto este jueves los responsables de Cataluña y Madrid, que indicaron que se podría duplicar el número de fallecimientos registrados, al tener en cuenta este nuevo criterio.

Grandes discrepancias entre las cifras reales y las oficiales

Sin embargo, se quedarán fuera de este recuento todas las personas que hayan muerto sin tener una prueba diagnóstica del virus, dejando de nuevo una laguna al respecto, por la que se podrían dejar de tener en cuenta a centenares, o incluso miles, de fallecidos.

De hecho, ya este jueves el presidente de la Generalitat, Quim Torra, señaló que el número de muertes en Cataluña podría cifrarse en 7.097 fallecidos, frente a los 3.855 oficiales, teniendo en cuenta los datos facilitados por las funerarias, al igual que la Comunidad de Madrid, que estimó que el número total de decesos podría superar los 10.000.

Sin embargo, Simón no está dispuesto a incluir estos nuevos datos, ya que los mayores ingresados en residencias "son personas que tienen factores de riesgo y obviamente son personas que tiene la sintomatología, pero basar el caso en los síntomas con lo poco específicos que son daría una vision muy distorsionada de la realidad".

El Gobierno quiere nuevos datos sobre el impacto de la pandemia

Junto a ello, en la nueva normativa publicada en el BOE, se establece que las autonomías deberán informar sobre todos los casos confirmados mediante PCR o test rápido, aquellos que han presentado síntomas o que son asintomáticos en el momento de la prueba, así como del total de casos confirmados de coronavirus en profesionales sanitarios.

También se tendrá que informar sobre las altas que se hayan producido, tanto hospitalarias como domiciliarias, así como los casos acumulados totales confirmados que han ingresado en centros hospitalarios u otros centros habilitados para la atención de pacientes, incluyendo las Unidades de Cuidados Intensivos, así como las personas que han ingresado en las UCI, incluidas las camas que se han ampliado para la lucha contra el Covid-19.

Con esta nueva normativa, en la que también se exige ampliar la información acerca de la capacidad asistencial, el Gobierno pretende conocer más de cerca el alcance de la pandemia, aunque sigue siendo insuficiente, ya que el número de fallecidos seguirá siendo una incógnita.