La maniobra de Alberto Garzón de renunciar a presentarse es vista por los ‘morados’ como un intento de presión mientras se desangran entre vetos y dimisiones
Yolanda Díaz tiene un plan para minar a Podemos y así tener manos libres para confeccionar unas listas electorales donde ella tengo el control del futuro grupo parlamentario y no los afines a Ione Belarra e Irene Montero. Las elecciones del 28 de mayo, con una cúpula morada aún en shock tras el varapalo recibido de las urnas, es el mejor as de la vicepresidenta para negociar las condiciones más favorables dentro del acuerdo de Sumar con Podemos.
En el entorno de la formación morada ya ven la mano de vicepresidenta segunda detrás de maniobras como la decisión del ministro de Consumo y líder de IU, Alberto Garzón, de no ir en las listas del 23 de julio para facilitar según él la renovación de caras.
He admirado siempre tu templanza y generosidad, tu manera de hacer política y de defender a las personas trabajadoras.
— Yolanda Díaz (@Yolanda_Diaz_) June 2, 2023
El compromiso y la valentía para cambiar las cosas nunca dejan la primera línea. Seguiremos trabajando juntos. Gracias, Alberto❤️ https://t.co/ljyCe26NIM
Para muchos, es una indirecta a Ione Belarra e Irene Montero que ahora tienen que cerrar un acuerdo deprisa y corriendo y tras haber recibido un correctivo el 28M.
Aunque muchos recuerdan que los aliados de Yolanda Díaz, como Ada Colau o Joan Ribó, también han perdido su poder municipal, no es la misma destroza electoral que ha vivido Podemos desapareciendo de comunidades clave como Madrid y la Comunidad Valenciana -en esta última, además, con decenas de cargos que se van al paro-.
Podemos vive ahora una cascada de dimisiones y de ruido de sables -con solicitudes como la del ahora vicepresidente del gobierno de Baleares exigiendo a la cúpula que dimita y alertando de la desaparición de la formación- y hasta de peticiones de vetar nombres incómodos para el electorado en las listas como el de Ángela Rodríguez Pam.
Esto deja entre la espada y la pared a dirección de Ione Belarra e Irene Montero, con gente en los territorios pidiendo ya el acuerdo de Sumar, y eso Yolanda Díaz lo sabe para poder aprovecharse en la negociación. El 28M era el arma que Yolanda Díaz esperaba para negociar, y el 23J le ha dado además la presión del tiempo sobre los podemitas.