Las negociaciones sobre Doñana dan otra tregua a la ley de regadíos

Las reuniones de trabajo que se están produciendo entre el ministerio para la Transición Ecológica del Gobierno de España y la Junta de Andalucía sobre el futuro de Doñana y de los agricultores que cultivan en su entorno tienen visos de encontrar una solución al problema, que se centra, fundamentalmente, en el uso del agua.

Aunque existe un mutismo total por parte de las administraciones implicadas sobre el contenido de las negociaciones, lo que sí se sabe es que han provocado que la proposicion de ley que impulsó el PP y Vox en el Parlamento andaluz tampoco lleguen al debate para su aprobación en el próximo pleno del 25 y 26 de octubre.

Moreno obliga al Gobierno a mirar a Doñana y advierte: la ley "no está retirada"

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, marcó un plazo de un mes para trabajar con el Ministerio, tras la reunión que mantuvo con la titular Teresa Ribera, para resolver los problemas de Doñana y el Condado de Huelva y avisó que, pasado ese plazo, se retomaría el debate de la ley, que se pospuso para dar margen a alcanzar un acuerdo.

Moreno señaló que el punto infranqueable en esa negociación serían los agricultores, para los que exigió una solución ante la injusta situación en la que se encuentran, pero todo apunta a que puede haber una alternativa y por ello la ley no se presenta en el orden del día de este mes de octubre en la Cámara.

Clima positivo para llegar al acuerdo

Al respecto de este asunto, este miércoles se ha pronunciado el portavoz de la Junta y consejero de Medio Ambiente, Ramón Fernández-Pacheco, que ha apuntado que se está "creando un clima muy positivo" para "alcanzar un acuerdo" respecto a Doñana con el Gobierno central. La "solución" tiene que pasar, según la Junta, por hacer "perfectamente compatible" la preservación del parque nacional con el "derecho a tener un proyecto de vida" de las "familias que viven en su entorno".

A preguntas de los periodistas en un acto en Almería, Fernández-Pacheco ha declinado precisar cuáles son los avances que se están produciendo en la negociación y ha abogado por la "discreción acerca de los pormenores de la reunión" hasta "que tengamos algo que contar, cuando, por supuesto daremos buena cuenta".