Desaparecidos en combate prácticamente desde que comenzó el escándalo "navideño" del corazón, el exguardia civil y su esposa han asomado la cabeza para tomar medidas muy drásticas.
En un nuevo paso hacia adelante en el culebrón más largo que nunca dio una fiesta navideña de empresa en televisión, este lunes Jorge Pérez y su esposa Alicia Peña decidieron golpear primero... al menos a nivel judicial, porque a nivel mediático la que está punto del KO técnico es Alba Carrillo.
El caso es que tras el demoledor PoliDeluxe que se marcó Carrillo el fin de semana, este lunes el guardia civil ganador de Supervivientes y su mujer hicieron llegar un burofax a Sálvame. Un texto legal con una petición y una advertencia y/o amenaza; a saber, o se deja de hablar de la vida íntima y sexual de Pérez o el matrimonio tomará medidas legales penales.
En el burofax remitido al programa de corazón de Telecinco, los abogados de la pareja aseguran que ellos "niegan y desmienten toda la información que se ha ido publicando en los medios, la versión de la propia Alba (Carrillo)".
Asimismo piden que se deje de hablar y valorar al respecto de la vida "pasional e íntima" de Jorge Pérez porque esto les está afectando mucho a sus derechos al honor y la imagen, no solo suyos sino del resto de su familia.
Eso sí, parece que Jorge Pérez y Alicia Peña lo tendrán complicado para que se deje de hablar del asunto porque las audiencias acompañan a Telecinco desde que estalló el escándalo. Sin ir más lejos, este lunes con el burofax, subieron todas las versiones de Sálvame con respecto a días anteriores: Limón (12.1% de share y 1.249.000 espectadores), Naranja (13.1% y 1.232.000) y Sandía (8.3% y 985.000).