Negro pasado del policía que cazó a Sancho: enchufe, corrupción y tiroteado

Este martes 15 de agoto les contábamos en ESdiario que Surachate Hakparn, subdirector de la policía tailandesa, comparecía en una multitudinaria conferencia de prensa para ofrecer detalladamente estos datos relacionados con el asesinato de Edwin Arrieta por el que culpa a Daniel Sancho y daba por cerrada la investigación, anunciando también que solicitará al juez la pena de muerte para el acusado por el delito de asesinato con premeditación.

De esta forma, la investigación llevada a cabo durante estos días descarta la hipótesis de una muerte accidental, como había alegado el cocinero español en un primer momento. Asimismo, la policía se muestra convencida de que, al contrario de lo que ha estado defendiendo la abogada de Sancho en los platós de televisión, Carmen Balfagón, no hay una segunda o tercera personas que hayan participado en el crimen, dado que no han encontrado ni restos de ADN ni imágenes en las cámaras de los alrededores. Según la policía, el móvil del crimen fue que Daniel quería dejar la relación sentimental que mantenían y Edwin se negaba.

Las autoridades de Tailandia se han tomado muy en serio el caso, desde el primer momento, y le han dado prioridad a las investigaciones con una orden directa: resolver el caso cuanto antes, consciente del deterioro de imagen que puede acarrear y las negativas repercusiones para una de sus principales industrias, el turismo.

Con Sancho ya en prisión, el peso de las investigaciones, y el protagonismo en la rueda de prensa, lo haya llevado el subdirector de la policía, apodado Big Joke (el gran chiste) por su talante siempre bromista y sonriente.

Daniel Sancho y el pasado de su 'verdugo'

Pero además de tratarse ahora de un personaje muy mediático, el ‘gran chiste’ tiene un pasado un tanto singular, con muchos capítulos negros en su mochila.

Hijo de policía, ascendió a velocidad vertiginosa por el escalafón, batiendo sucesivos récords de precocidad hasta alcanzar el rango de general –el más alto en Tailandia– antes de cumplir los cincuenta.

Tal y como recoge ABC, no obstante, se cuestiona si dicha meteórica carrera responde a su personalidad y habilidades a sus conexiones políticas. Su progenitor formaba parte de la órbita del por entonces subdirector nacional de policía Samer Damapong, padre de Potjaman Na Pombejra, a su vez exmujer de Thaksin Shinawatra, idolatrado primer ministro desde 2001 hasta su derrocamiento por un golpe militar en 2006, y madre de Paethongtarn Shinawatra, actual líder del partido político Pheu Thai.

La policía tailandesa, en rueda de prensa sobre el caso Daniel Sancho, confirma que el asesinato de Edwin Arrieta es un asesinato con planificación, y por lo general se pide la pena de muerte. pic.twitter.com/foXqCxBw05

— 𝑅❀𝒸ío (@mohedanismo) August 15, 2023

Estas credenciales le permitieron profundizar sus vínculos con el Gobierno de la Junta Militar. Fue nombrado comandante de la Oficina del Comisionado General, en contacto directo con el primer ministro Prayuth Chan-ocha, y después portavoz asistente del viceprimer ministro Prawit Wongsuwan. No obstante, su suerte pareció agotarse en marzo de 2019, cuando fue destinado a un puesto civil inactivo; un cambio sobre el que las autoridades no dieron explicación alguna pero que habría estado motivado por una supuesta investigación. 

Surachate sugirió entonces un posible caso de corrupción en la cúpula policial, y en enero de 2020 su coche fue acribillado a balazos en el centro de Bangkok mientras él recibía un masaje en un salón cercano. Optó por retirarse y ordenarse como monje budista en India.

El diario mencionado recuerda que en marzo de 2021, el primer ministro anunció su reincorporación a las fuerzas de seguridad.