Performance de la izquierda contra Ayuso: “Con las tripas fuera queremos verla"

La izquierda ha montado una gran performance contra Ayuso este fin de semana con una invención que no se sostiene: el desmantelamiento de la sanidad pública en Madrid. Es una ensoñación, sí, pero hay que reconocerle que se lo monta bien. En eso de orquestar una campaña, la que sea, gana a la derecha por goleada.

La estrategia es clara y sencilla. Semanas de una huelga en la atención primaria sostenida de forma artificial, con 30 o 40 médicos cada día, para poder llegar hasta este fin de semana e incluso hasta las elecciones con un conflicto inexistente en la práctica que les permita organizar todo lo demás. El sábado, altavoz en los Goya con Jordi Évole como fiel servidor del régimen. Y el domingo, calles de Madrid repletas de pancartas y odio hacia la presidenta madrileña: “con las tripas al aire nos gustaría verla”, decían en un vídeo que se ha hecho viral. 

Y todo eso aliñado con el altavoz que le han dado al tema los periodistas progres en las redes sociales. No ha faltado ni uno participando de la patraña de que Ayuso se quiere cargar la sanidad pública. Ni uno. No hace falta rastrear mucho las redes para darse cuenta. 

Manifestación en Madrid a favor de la sanidad pública para apoyar a todo el personal sanitario que lleva meses luchando por unas condiciones que les permitan seguir cuidándonos. 🙌🏼 pic.twitter.com/52kT28626V

— Verónica Fumanal (@veronicafumanal) February 12, 2023

"Ya no es que estén destruyendo la sanidad pública. Es que, además, si lo señalas te desprecian con chulería tabernaria"

Àngels Barceló. pic.twitter.com/teeURQrERZ

— Hoy por Hoy (@HoyPorHoy) February 13, 2023

Lo de Évole el sábado se comenta solo. Un tipo que nada tiene que ver con el cine, es invitado a subir al escenario para que aproveche los micrófonos y la audiencia de la gala de los premios Goya para atacar a Ayuso y recordar que el domingo hay una manifestación en Madrid contra el desmantelamiento de la sanidad pública.

Ni una palabra sobre la invasión rusa a Ucrania. Tampoco un reproche mínimo al Gobierno por beneficiar a centenares de delincuentes sexuales con la ley del solo sí es sí. En esta película solo hay una mala y se llama Isabel Díaz Ayuso. Los de la zeja, entregados una vez más a las subvenciones y el pesebre. 

La doble vara de la delegación del Gobierno

El domingo llega la manifestación. La izquierda llena Cibeles. Donde hace unas semanas, en la manifestación contra el Gobierno de Pedro Sánchez, cabían 38.000 personas esta vez han cabido 250.000, según los datos de la fervorosa y desvergonzada sanchista que está al frente de la delegación del Gobierno en Madrid. 

“No es una protesta política, es el pueblo madrileño harto de que se recorte en Sanidad para destruir el estado de bienestar”, dicen. A la vez, nos muestran un monigote, una especie de ninot a la madrileña, de Isabel Díaz Ayuso que llevan a casi todas sus protestas a modo de burla. Aquí la estamos preparando para el domingo, ahora está como nos gustaría verla, con las tripas al aire, explican estos apolíticos manifestantes. 

La ultraizquierda 'podemita' prepara una "encerrona" a Ayuso en la Complutense

La hipérbole de la izquierda contra Ayuso, pintado una sanidad pública que se corresponde más con la de un país africano que con la de la comunidad más próspera de España, no se sostiene. Es más, es contraproducente para los intereses del PSOE, Mas Madrid, Unidas Podemos, etc, porque se les ve el plumero desde Sebastopol.

La realidad es la que van a escribir los madrileños en las urnas el día 28 de mayo, no la que se empeña en inventarse la izquierda, por mucho empeño que ponga en ello.

La realidad afortunadamente es otra: Madrid tiene algunos problemas con su sanidad pública, claro,  pero no mayores sino menores que la mayoría de las comunidades autónomas. Madrid tiene 6 de los 10 mejores hospitales de España; tiene unas de las listas de espera más bajas del país, un hospital de emergencias que escuece a la izquierda y va a poner en marcha la primera residencia para enfermos de ELA de España, entre otras cosas. 

La realidad es la que van a escribir los madrileños en las urnas el día 28 de mayo, no la que quiere inventarse la izquierda, por mucho empeño que ponga en ello.