La reina Camila elige Ciudad Real y una lujosa finca para su descanso por estrés

Está claro que las polémicas en torno a la Casa Real británica son el pan de cada día pero estamos ante unas semanas verdaderamente agitadas en el Palacio de Buckingham. Desde la enfermedad del rey Carlos III hasta las fotos retocadas por la princesa de gales Kate Middleton, la realeza de Inglaterra se enfrenta a horas complicadas y por ello uno de sus miembros más destacados, la reina Camila, ha decidido tomarse unos días de vacaciones.

Desde la más alta institución británica comunicaron que por “agotamiento laboral”, la reina consorte se tomaba unas vacaciones del 3 al 10 de marzo. Y es que Camila ha tenido que ocupar el papel de máxima representante de la Corona por la ausencia de su marido por motivos de salud y del heredero al trono Guillermo debido a la operación y convalecencia de su esposa Catalina. En total 13 actos seguidos que han hecho mella en Camila y sus 76 años.

Los reyes de Inglaterra, Carlos III y su mujer Camila de Cornualles.

Como suele ser habitual, no se dieron detalles del lugar de descanso de la reina y tan solo se apuntó que sería en el extranjero. Pues bien, tal y como ha contado en TardeAR la periodista Marisa Martín Blázquez, el lugar elegido para combatir el cansancio y el estrés por parte de Camila de Cornualles ha sido Ciudad Real. En concreto, una lujosa y enorme finca llamada La Garganta que cuenta con 15.000 hectáreas para cazar. Se encuentra situada en el término municipal de Almodóvar del Campo, en el Parque Natural del Valle de Alcudia y Sierra Madrona.

Imagen del Parque Natural Valle de Alcudia y Sierra Madrona, en Ciudad Real.

Una finca por la que ya han pasado varias personalidades de la realeza europea -incluido el rey emérito Juan Carlos, los príncipes de Mónaco o los reyes de Holanda-, así como de la alta sociedad aficionados a la caza. De hecho, la principal actividad que quería realizar la reina era la caza de perdices. Sin embargo -y nunca mejor dicho- le acabó saliendo el tiro por la culata ya que el mal estado del tiempo no le permitió realizar la actividad. Aún así, la periodista especializada afirma que su estancia le ha servido para su principal objetivo, que era descansar, y también para “probar la gastronomía de la tierra”.